Un enorme estandarte del Globo fue Oscar Pablo Rossi. El “Coco” Rossi. Dicen, el mejor tirador de caños de la historia. Y sin exagerar, digamos, seguramente, uno de los más habilidosos para ello. Un gran jugador. Enorme. Capaz de jugar de 8 adelantado o de centrodelantero. Era el entreala derecho, para las menciones de los tiempos. El que jugaba entre el 7 y el 9.
El “Coco” Rossi nació en Buenos Aires un 27 de julio de 1930 y falleció allí, el 5 de septiembre de 2012 a los 82 años. Jugó en Huracán, Racing, San Lorenzo y Almagro en la Argentina y en Nacional de Medellín y Sporting Cristal de Perú en el exterior.
Fue integrante de la selección argentina entre el 56 y el 63, jugando 21 cotejos .
Debutó en 1950, muy pibe, en la Primera de Huracán , club en el que en tres períodos jugó 165 partidos y marcó 43 goles.
Su debut en el Globo se produjo en 1950. El 1° de octubre por la fecha 25 del torneo de AFA, Huracán le ganó a Quilmes cuatro a tres. El Quemero fue con Díaz; Romeral y Romero; Staukas, Giménez y Badín; Armoa, Oscar Rossi, Bravo, Vigo y Quiñonez.
Marcaron para el local tres veces Vigo y Armoa. Para el Cervecero lo hicieron Gallo, Santiago y Cantatore. Arbitró el inglés Cross.
Huracán terminó penúltimo y debió desempatar con Tigre para saber quién acompañaba a la B a Rosario Central, que finalizó en la cola de la tabla. El Globo se quedó en Primera, al ganar ambos partidos ante los de Victoria.
Cuando de Rossi se habla, la relación de amistad con Héctor Veira surge de inmediato. “Coco Rossi, mi compañero, en una gira por Europa me puso el apodo. Era el más pibe de todo el plantel de San Lorenzo, tenía 17 años, y después de un muy buen partido en Italia, la prensa me empezó a decir ‘Bambino’, porque estaba de moda Gianni Rivera, al que llamaban ‘Il Bambino d’oro’. Se ve que yo jugaba parecido a él, y como era el más chico, los periodistas italianos me dieron manija con eso y al volver a Buenos Aires, Rossi empezó con ‘Bambino’ de acá, ‘Bambino’ de allá. Y quedó para siempre.” Textual de Veira en un reportaje de El Gráfico.
Dicen que Rossi logró burlarse del Bambino una tarde en su casa, algo raro ya que era Veira el que hacía bromas siempre: “Alguna vez Coco le dijo al Bambino en un entrenamiento que tuviera cuidado que en cualquier momento le iba a hacer un caño. El Bambino se andaba con cuidado y no se acercaba mucho a Rossi para que no cumpliera su promesa. Pero en una cena formal en casa del Coco, cena con parejas y todo, el Bambino se apareció trajeado y perfumado y llevando el postre. Cuando Rossi iba a su encuentro amagando el abrazo, pisó la tortuga que tenía en su casa, la desplazó diez centímetros por el mosaico encerado y la metió entre las piernas de un Veira atónito. Rossi sólo dijo: ‘Caño, cañazo…’”. Anécdota de fútbol puro.
En 1954, pasó a Racing en donde estuvo apenas un año. El 28 de abril debutó ante Newell´s por la tercera fecha. Ganó la Academia en Rosario dos a uno con dos goles de Pizutti y Racing fue con Domínguez; Dellacha y García Pérez; Giménez, Balay y Gutiérrez; Cupo, Rossi, Pizutti, Simes y Sued. Jugó en Racing nueve encuentros y marcó dos goles.
Fue en 1960, diez años después de debutar en Huracán y habiendo vuelto entre el 55 y el 59 a Patricios, que llegó a San Lorenzo. Con casi treinta años jugó a un nivel superlativo en Boedo hasta el 64; 104 partidos con 23 goles.
Debutó en el Azulgrana en la tercera fecha, victoria ante Vélez Sarsfield cuatro a dos.
Dos de Boggio, uno de Facundo y otro de él, los goles. Basílico y Callá los de Liniers.
Su primer San Lorenzo en AFA fue con Tarnawsky (Carrillo); Cancino e Iñigo; Castillo, Reynoso y Ferro; Facundo, Ruiz, Oscar Rossi, Sanfilippo y Boggio.
Colombia y Perú entre el 65 y 66, Almagro en el 67 y final en Huracán en el 69, con 40 años. Técnico en Platense, Argentinos Juniors, inferiores de Huracán y equipos del ascenso.
Jugó en la selección. Debutó en 1956 cuando estaba en Huracán, en un partido por la Copa Raúl Colombo ante Brasil en el Maracaná, ante 90 mil personas. Ganó Argentina dos a uno, dirigida por Guillermo Stábile, eterno técnico de AFA, por esos tiempos.
Los goles los marcaron Sanfilippo y Garabal y Argentina formó con Roma (era arquero de Ferro); Pizarro (SL) y Vairo (River); Mantegari (River), Néstor Rossi (River) y Benegas (SL); Sansone (Vélez), Oscar Rossi (Huracán), Infante (Huracán), Sívori (River) y Garabal (Ferro). Entraron Schadlein (Gimansia) y Sanfilippo (SL).
Una de las particularidades en la historia de Coco Rossi es haber marcado el primer gol de un equipo argentino en la Libertadores. San Lorenzo debutaba en cancha de Huracán en la Copa Libertadores del 60, primera edición de la misma, y goleó tres a cero a Esporte de Brasil. Esa tarde San Lorenzo se alineó con Tarnawsky, Páez e Iñigo, Castillo, Reynoso y Ravecca, Facundo, Miguel Ruiz, Coco Rossi, Sanfilippo y Boggio.
A los 14 minutos del segundo tiempo, convertía el primer gol de San Lorenzo en la historia de la Copa. El tanto llegó tras un pase de Facundo, tiró Rossi y rebotó en Leone, tomó otra vez el balón Facundo, alejando la pelota el defensor Henrique, que tomó “Coco” Rossi, que con tiro corto estableció la apertura del marcador.
“Coco Rossi era así; un rebelde del fútbol, era tocar y jugar, tocar y adormecerse en el placer de la pelota pegada al botín en la larga carrera con adversarios que pasaban de largo. Coco Rossi era una pisada y un cambio de frente, Coco era un caño y un sombrero para sacarle una sonrisa al hincha”. Las páginas de San Lorenzo lo recuerdan así. Y agregan en su recuerdo: era el Neruda del fútbol. Todo dicho.
Osvaldo Alfredo Wehbe Comentá esta nota Noticias Relacionadas
