El moldense compartió la emoción de haber alcanzado este logro internacional. “Fue una experiencia muy linda, con mucha alegría y felicidad, aunque también con mucha tensión. Hasta el último momento tenía que pegarle a todas las hélices que me quedaban por tirar porque no tenía posibilidad de errar. Pero al final, pude disfrutarlo”, expresó el atleta de la región, recordando los momentos claves de su desempeño en la competencia.
La preparación para el evento mundialista no fue sencilla y el propio campeón reconoció que no pudo entrenar como hubiese deseado. “La verdad, tuve muy poca preparación para este mundial por cuestiones personales. Ha sido un año de muchos cambios para mí, lo que me hizo no estar tan presente en el tiro. Pero el tiro es como andar en bicicleta, nunca te olvidás. Aunque uno, cuando entrena más, tiene un nivel de tiro mucho más alto”, aclaró el joven, quien, pese a las dificultades, logró dominar la presión y salir adelante.
“Es muy especial porque venir a tirar afuera, a un club como Somontes, era una oportunidad y un sueño que tenía por cumplir”.
Durante el torneo, Emanuel tuvo que enfrentarse a los mejores tiradores del mundo en un club emblemático, el Somontes de Madrid. “Acá vine a competir con los mejores. Es un club muy lindo al que todos quieren venir”, comentó. Además, destacó el nivel de la organización, liderada por la Federación FAN 32, y el formato de la competencia, que incluye una serie de 65 hélices repartidas entre tres instancias: 20 en el país de origen, 20 en la Copa Presidente y 25 en el mundial.
El tirador ya ostenta varios títulos, pero este campeonato mundial tiene un valor especial para él. “Es muy especial porque venir a tirar afuera, a un club como Somontes, era una oportunidad y un sueño que tenía por cumplir”, confesó el joven moldense. Asimismo, subrayó la emoción que le generó ver la bandera argentina en lo más alto, así como escuchar los acordes del Himno Nacional.
El desafío no termina acá para Emmanuel, quien ya tiene en la mira nuevas competencias. Actualmente, está participando en Copa de Oro de Giuseppe Arnone y mañana arranca la Copa del Rey en Madrid, uno de los torneos más complicados de la temporada, además ya se prepara para futuros desafíos. “Ahora se viene otro mundial y, además, probablemente la Copa del Mundo de la Federación se realizaría en Argentina, lo que me facilitaría mucho para ir a competir”, señaló.
A pesar de los obstáculos económicos que enfrentan los atletas en deportes no tan masivos como el tiro a la hélice, resaltó el esfuerzo de su familia y la importancia de contar con apoyos para poder competir al más alto nivel. “Es un deporte complicado; si no conseguís un sponsor, es difícil. Mi familia ha hecho un esfuerzo muy grande para que yo pueda estar acá”, reconoció el joven campeón.
Cabe señalar que el tiro a la hélice, una disciplina de tiro al vuelo que requiere gran precisión y habilidad, enfrenta a los tiradores con hélices de plástico que giran de manera aleatoria. El objetivo es disparar sobre estas hélices, rompiendo el plato que forma parte del blanco móvil.
Finalmente, Emmanuel agradeció el apoyo de la región y destacó el orgullo de representar a Argentina y a Córdoba en la competencia internacional. “Uno siempre trata de representar bien a su país y a la zona también. Es un deporte complicado, pero está bueno que alguien pueda llegar”, concluyó el joven, dejando claro que sus sueños de seguir compitiendo y alcanzar nuevos objetivos están más vigentes que nunca.
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Emmanuel Torello, moldense y representante de Argentina, en plena acción durante la Copa del Mundo de Tiro a la Hélice, que se desarrolló el pasado sábado y domingo en el Club Somontes de Madrid, España.
