Hay un nuevo paradigma en la universidad del presente y que acaso será excluyente en la universidad del futuro: y es el maridaje entre actividad empresarial y conocimiento. Una combinación que acaso hubiera sido impensada pocos años atrás pero que hoy se registra en el mundo entero.
Y es un hecho que la casa de altos estudios local no escapa a esta tendencia. Lo prueba el crecimiento exponencial del Unipyme, “ese paraguas bajo el cual hay tres proyectos muy importantes -según Darío Poncio, presidente de la DTCT de la UNVM- Esos proyectos son la “Ventanilla del Emprendedor”, que es de 2004, y la “Incubadora de empresas” junto a la “Oficina de Propiedad intelectual”, que son de 2016”.
-¿El nacimiento de la incubadora se debió al desempleo del 2002?
-En cierto modo, sí. Porque tras la crisis de ese año surgieron muchos emprendedores “por necesidad”; gente que necesitaba arrancar con una Pyme para subsistir y no para aprovechar oportunidades del mercado. La idea era que la Universidad se involucrara con esa realidad y ayudara en cuestiones básicas; desde manejar una caja a calcular costos al tema de las ventas. A ese programa lo mantuvimos pero en 2016 y viendo que se abría el mercado del país, nos vimos en la necesidad de reformularlo, incursionando en las nuevas las Tics (Tecnologías de Información y Comunicación).
-¿Por qué?
-Porque hoy, el programa de las “incubadoras” ya no apunta al emprendedor “por necesidad” sino a los que tienen mayor sustentabilidad; los emprendedores que desde sus empresas pueden crecer y generar puestos de trabajo aprovechar oportunidades de mercado. Hoy estamos trabajando con emprendimientos; dos son tecnológicos y el tercero es productivo. Al mismo tiempo, las “ventanillas” trabajan con 4 “emprendimientos de subsistencia”.
-Hoy que escasea el empleo ¿es tiempo de Pymes “por necesidad”?
-Es muy posible. En el 2004, la Universidad Austral, que era pionera en estudios de mercado, determinó que dos de cada tres emprendedores argentinos eran por necesidad. Eso se fue bajando hasta que llegó a ser uno de cada tres. No tengo datos actualizados pero seguro estamos más cerca del 2004.
-¿Ves alguna similitud entre la crisis del 2002 y la situación actual?
-A esta pregunta no te la puedo responder como director de Transferencia pero sí como economista. Y sí, la situación laboral actual es preocupante. Y lo que el ministro Dujovne viene de anunciar, es más preocupante todavía.
-¿Qué anunció?
-Que habrá 3.200 millones de dólares menos de gasto, es decir una “poda de obra pública”. Y eso significa menos puestos de trabajo para el personal no calificado. Si los obreros de la construcción no consiguen trabajo ¿Qué harán? Seguramente estas medidas producirán aumento de emprendedores por necesidad, ya que el gobierno está apostando a los emprendimientos tecnológicos y las Tics, que son el fuerte del país.
-¿Qué papel debe jugar el Centro de Transferencia en la actual situación?
-Un rol fundamental; porque todas las actividades de “ventanilla” e “incubadora” son gratuitas. La universidad pone su recurso humano calificado para ayudar.
Tics made in Villa María
-¿Por dónde pasa el futuro empresarial de la ciudad y la provincia?
-Sin duda por la tecnología. Hoy, tanto Córdoba como Villa María tienen mucha gente viviendo de las tics. Córdoba exporta al exterior mucho software y son servicios que generan un ingreso de divisas. Trabajamos permanentemente con el Cluster Tic Villa María.
-¿Das fe de la actividad en la ciudad?
-Totalmente. Porque el observatorio que dirigimos desde aquí, está haciendo un relevamiento en toda la ciudad. El sector crece día a día generando puestos de trabajo genuino.
Cátedra Abierta para emprendedores
Por su parte, este es el tercer año consecutivo que la UNVM propone su Cátedra Abierta Pymes (CAP), una serie de cursos gratuitos para emprendedores. Y así explica el proyecto Cristian Aramayo, miembro de la DTCT a punto de licenciarse en Administración en la universidad local.
“El CAP es un ciclo de capacitación de once módulos para emprendedores de la ciudad y la región. La idea es ahondar en aspectos como la planificación estratégica, el control de calidad o de gestión. Este año se dicta en el auditorio de Laboratorio Gornitz. Y el próximo jueves a las 18 será el cuarto encuentro. El tema será “Herramientas Financieras”. La gente puede anotarse o asistir directamente. Hay un promedio de 30 personas por módulo”.
Y Juan Pablo Iturria, miembro de la DTCT a punto licenciarse en Economía en la UNVM, cierra diciendo que “últimamente tenemos muchísimas consultas con respecto a las Sas (Sociedades de Acciones Simplificadas), una de las asociaciones de más fácil acceso para un pequeño emprendimiento. En estos tres años de CAP hemos tenido unos 700 emprendedores de la ciudad y la zona, lo que muestra el interés que hay en la ciudad y la calidad del servicio que brinda la UNVM”.
Iván Wielikosielek
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-¿El nacimiento de la incubadora se debió al desempleo del 2002?
-En cierto modo, sí. Porque tras la crisis de ese año surgieron muchos emprendedores “por necesidad”; gente que necesitaba arrancar con una Pyme para subsistir y no para aprovechar oportunidades del mercado. La idea era que la Universidad se involucrara con esa realidad y ayudara en cuestiones básicas; desde manejar una caja a calcular costos al tema de las ventas. A ese programa lo mantuvimos pero en 2016 y viendo que se abría el mercado del país, nos vimos en la necesidad de reformularlo, incursionando en las nuevas las Tics (Tecnologías de Información y Comunicación).
-¿Por qué?
-Porque hoy, el programa de las “incubadoras” ya no apunta al emprendedor “por necesidad” sino a los que tienen mayor sustentabilidad; los emprendedores que desde sus empresas pueden crecer y generar puestos de trabajo aprovechar oportunidades de mercado. Hoy estamos trabajando con emprendimientos; dos son tecnológicos y el tercero es productivo. Al mismo tiempo, las “ventanillas” trabajan con 4 “emprendimientos de subsistencia”.
-Hoy que escasea el empleo ¿es tiempo de Pymes “por necesidad”?
-Es muy posible. En el 2004, la Universidad Austral, que era pionera en estudios de mercado, determinó que dos de cada tres emprendedores argentinos eran por necesidad. Eso se fue bajando hasta que llegó a ser uno de cada tres. No tengo datos actualizados pero seguro estamos más cerca del 2004.
-¿Ves alguna similitud entre la crisis del 2002 y la situación actual?
-A esta pregunta no te la puedo responder como director de Transferencia pero sí como economista. Y sí, la situación laboral actual es preocupante. Y lo que el ministro Dujovne viene de anunciar, es más preocupante todavía.
-¿Qué anunció?
-Que habrá 3.200 millones de dólares menos de gasto, es decir una “poda de obra pública”. Y eso significa menos puestos de trabajo para el personal no calificado. Si los obreros de la construcción no consiguen trabajo ¿Qué harán? Seguramente estas medidas producirán aumento de emprendedores por necesidad, ya que el gobierno está apostando a los emprendimientos tecnológicos y las Tics, que son el fuerte del país.
-¿Qué papel debe jugar el Centro de Transferencia en la actual situación?
-Un rol fundamental; porque todas las actividades de “ventanilla” e “incubadora” son gratuitas. La universidad pone su recurso humano calificado para ayudar.
Tics made in Villa María
-¿Por dónde pasa el futuro empresarial de la ciudad y la provincia?
-Sin duda por la tecnología. Hoy, tanto Córdoba como Villa María tienen mucha gente viviendo de las tics. Córdoba exporta al exterior mucho software y son servicios que generan un ingreso de divisas. Trabajamos permanentemente con el Cluster Tic Villa María.
-¿Das fe de la actividad en la ciudad?
-Totalmente. Porque el observatorio que dirigimos desde aquí, está haciendo un relevamiento en toda la ciudad. El sector crece día a día generando puestos de trabajo genuino.
Cátedra Abierta para emprendedores
Por su parte, este es el tercer año consecutivo que la UNVM propone su Cátedra Abierta Pymes (CAP), una serie de cursos gratuitos para emprendedores. Y así explica el proyecto Cristian Aramayo, miembro de la DTCT a punto de licenciarse en Administración en la universidad local.
“El CAP es un ciclo de capacitación de once módulos para emprendedores de la ciudad y la región. La idea es ahondar en aspectos como la planificación estratégica, el control de calidad o de gestión. Este año se dicta en el auditorio de Laboratorio Gornitz. Y el próximo jueves a las 18 será el cuarto encuentro. El tema será “Herramientas Financieras”. La gente puede anotarse o asistir directamente. Hay un promedio de 30 personas por módulo”.
Y Juan Pablo Iturria, miembro de la DTCT a punto licenciarse en Economía en la UNVM, cierra diciendo que “últimamente tenemos muchísimas consultas con respecto a las Sas (Sociedades de Acciones Simplificadas), una de las asociaciones de más fácil acceso para un pequeño emprendimiento. En estos tres años de CAP hemos tenido unos 700 emprendedores de la ciudad y la zona, lo que muestra el interés que hay en la ciudad y la calidad del servicio que brinda la UNVM”.
Iván Wielikosielek
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