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Larreta puso un pie en Córdoba y en un Zoom juntó a 400 dirigentes

El jefe de Gobierno porteño mantuvo un encuentro en el que habló durante 40 minutos. Dijo que la oposición "debe seguir unida como hasta ahora más allá de las diferencias" y pidió ampliar el espacio "hacia el centro".

Hay una conexión electoral entre Córdoba y la Ciudad de Buenos Aires que se replicó en cada una de las últimas elecciones nacionales, y fue ratificada en el último turno en la que se eligió presidente y también diputados nacionales. En esa legislativa, el resultado fue tan sorprendente que Juntos por el Cambio obtuvo 6 bancas cuando ni siquiera internamente había certezas de lograr 5 sobre 9 en disputa. Córdoba y la Ciudad de Buenos Aires volvieron a mostrar comportamientos similares.

Lo cierto es que subido a esa conexión, Horacio Rodríguez Larreta empezó a hacer política en la provincia. Y dio un primer paso a través de una reunión vía Zoom en la que reunió a unos 400 dirigentes cordobeses, integrantes del Frente Cívico. El pretexto fue un encuentro bajo esa modalidad encabezado por Luis Juez y que promete continuar con otras figuras, como la de Martín Lousteau, entre otras.

Larreta insistió mucho en un par de ejes, durante la charla, según cuentan quienes fueron parte de la convocatoria, que estuvo celosamente cuidada. Una de las definiciones políticas centrales fue que “hay que construir un espacio de mayorías” y aseguró que “la posibilidad de crecimiento de la fuerza está hacia el centro del electorado”. De hecho, repitió que se siente más cómodo en esa parte del terreno ideológico que “en los extremos y entre los fanáticos”.

El jefe de Gobierno porteño remarcó: “Si nuestro espacio se concentra exclusivamente en los electores más fanatizados vamos a perder todas las elecciones”, pero dejó en claro que hay que sumar y no restar.

Fue una de las pocas ocasiones en las que abiertamente Rodríguez Larreta habló casi durante 40 minutos de política y analizó el contexto nacional, al que calificó como “muy preocupante por las tremendas consecuencias de la pandemia”. Allí destacó también que “es un momento para la búsqueda de consensos en la política, pero uno ve que en el Gobierno no están convencidos del todo de esto. Se lo ve errático, se dice una cosa y se termina haciendo otra”, expresó el jefe de Gobierno porteño, que es una de las figuras nacionales de mejor imagen en la provincia según distintas encuestas de opinión.

Después, se encargó de bajar un mensaje claro a la dirigencia cordobesa: “El año pasado hicimos una buena elección, en un contexto muy difícil. Pero esa buena elección no alcanzó para que ganemos y hay que ganar. Sin embargo, hoy somos una oposición unida con un gobierno peronista, y eso es algo inédito que debemos cuidar mucho. Hay que seguir trabajando juntos más allá de las diferencias porque como en todo frente podemos tener miradas distintas sobre algunos temas”, dijo, pero advirtió: “Hay ejes, como el de la defensa de las instituciones que no se negocian”.

Y pensando en las próximas contiendas electorales hizo foco en Córdoba y destacó: “Ahí generalmente ganamos, pero hay que ganar más ampliamente de lo que lo hicimos. Y en la provincia de Buenos Aires naturalmente tenemos un desafío enorme”, vaticinó.

Más tarde, retomó la idea sobre un frente que busque construir mayorías y subrayó: “Es necesario ampliar el espacio y siempre me van a ver en ese rol, con una tendencia clara hacia la moderación y el diálogo. Ahí tenemos que sostenernos más allá de que sea difícil por momentos, como ocurrió cuando hace pocos días nos quitaron parte de la coparticipación. Hubo dirigentes que me pedían otra actitud, pero yo voy a seguir con mis convicciones y creo que por ahí está el futuro. Después habrá otros dirigentes dentro del espacio con otras características. Porque en un equipo de fútbol, si todos jugamos de arquero vamos a perder todos los partidos”, señaló el jefe de Gobierno porteño desde una de las oficinas, durante un alto en sus tareas.

Y sobre las posibles candidaturas a futuro, Rodríguez Larreta alentó una compulsa interna en todos los niveles cuando sea necesario. “Debería haber Paso en todas las provincias y distritos, incluso en los que gobernamos”, disparó antes de agregar: “Que todos participen. Tenemos un proyecto para ganar ampliando hacia el centro. Sin pensar en sumar dirigentes, hay que sumar los votos de la gente”, pidió.

Si bien casi no se refirió a la vicepresidenta, el jefe de Gobierno porteño precisó que “observa su injerencia creciente en las decisiones del Gobierno”.

Y cerró: “No tengo dudas que para sacar a la Argentina hacia adelante hay que tener una base de entendimiento amplio y hay que comenzarla hoy. Porque cuando asumís ya es tarde”, redondeó en su primera incursión política en tierra cordobesa.