Cuando el fútbol no encuentra justificativos para otorgarle a un equipo cuando gana o se clasifica a instancias decisivas, los periodistas y analistas se encargan de encontrar algún buen motivo que parece oculto a la realidad o a la visión simple del futbolero.
Deportes |
Mellano es un arquero con vuelo
Universitario igualó 1-1 ante Rivadavia y lo venció 4-3 en dramática definición por penales en Arroyo Cabral. Monetto adelantó a la visita, pero empató Gozzerino, de penal. Falco fue expulsado y el “1” fue invulnerable
Ayer, el motivo por el cual Universitario clasificó a semifinales está a la vista y se llama: Mellano.
El arquero de la “U” hizo todo lo que un humano puede y hasta lo que quizás les correspondía hacer a sus compañeros: atajó 4 pelotas con destino de gol, atajó un penal en la serie definitiva desde los 11 metros y convirtió el que ejecutó.
Esa fantástica tarea del arquero marcó la diferencia en el duelo que Universitario terminó ganándole a Rivadavia, que sin brillar, futbolísticamente fue más que la “U”.
El resultado final, la fría estadística, dirá que Universitario empató 1-1 en Arroyo Cabral, tras empatar 0-0 en “El Campus” y que en la serie de penales se impuso la “U” por 4-3. Pero el “verde” fue más.
En caliente, como el buen futbolero debe sentir este maravilloso deporte, habrá que coincidir lo que Peñaloza dijo: “Con Mellano hoy no se podía. Atajó 10 puntos”.
Ese reconocimiento es justo. Lo que no tiene demasiadas explicaciones es el pasaje, más allá de que en determinado momento la serie se le presentó a la “U” y que su mayor mérito (no tanto como lo que tiene su arquero, pero vale la pena reconocérselo al equipo) fue ir al frente en el momento más adverso, cuando le empataron y se quedó con un hombre menos por la expulsión de Federico Falco.
La “U” enfrentará en semifinales a River Plate, y a más de uno se le escapó ayer en Cabral, donde todos especulaban con disfrutar de su clásico en semifinales, que “tiene la suerte del campeón”.
Por la suerte, o por los reflejos del “1”, la “U” se metió entre los 4, y plantel le sobra. Como será que se dio el lujo de ceder 4 futbolistas (Pratti, Sosa, Kamienski y Wartel) y al DT (Joselito Bernadó) al Seleccionado Argentino para disputar las Olimpíadas Universitarias en Nápoles, e igual clasificó en la Liga.
Ayer no le sobró nada, o mejor dicho, le sobró arquero. En la primera etapa, Mellano casi no participó, aunque Rivadavia ya había jugado mejor que la “U”, que se retiró a los vestuarios ganando 1-0, por un gol de Francisco Monetto.
El “10” encontró el gol cuando su equipo poco había ofrecido y sólo había mostrado orden. Un pelotazo mal despejado por Vincenti le quedó a Acosta, que envió un centro al medio del área, donde apareció Moyano para abastecer a Monetto, quien definió cruzado con clase, contra el palo derecho.
El 1-0 a los 17’ era injusto. El fútbol no es justo, y el gol no encontraba motivos para reconocerle a la “U” esa mínima diferencia.
El “verde” (sin el lesionado Bendazzi) había intentado con la velocidad de Bustos hiriendo por los dos extremos y otorgándole protagonismo a Zabala. Quizás le faltó más juego asociado, lo que también es mérito de Antonino y Aguirre, que se desgastaron para impedir a Gozzerino ser un actor principal del cotejo, y aunque Pereyra se las ingenió para aportar abastecimiento a sus dos puntas, faltó la claridad habitual de Demarchi, y hubo poca proyección de los laterales. Le alcanzó con Requena para apoderarse del balón, y alguna corrida de Bustos, pero no había profundidad, y si el 0-0 era un castigo, el 0-1 resultaba cruel.
Intentó empujar Lorca, pero elevó (18’). Empujó Requena, pero al habilitar a Zabala, el travesaño le negó el empate, y Bustos definió suave a las manos de Mellano (20’). La “U” no se inquietó. Si bien encontró otra pelota perdida en el área, y Aguirre desvió (21’), su libreto indicaba que era una serie de 1 gol, y ya lo había convertido.
Lo defendió bien. Rivadavia sólo lo hizo sufrir con un centro de Gozzerino que Vincenti cabeceó solo y apenas desviado en el segundo palo. El “verde” se desesperó, y Monetto tuvo su segunda oportunidad, al recibir de Barengo, pero esta vez elevó. Con el 50% alcanzó.
Esa efectividad era la diferencia de la serie. Rivadavia tuvo que modificar, ir a buscar el partido. Empezar a desordenarse para desordenar a un rival que vivía en la comodidad y el confort que le ofrecía el resultado. Un pelotazo largo encontró a Piccotti cubriendo bien la corrida de Zabala, pero al enganchar hacia el medio le sirvió el balón a Bustos, que llegó antes que el cierre del defensor, que le cometió penal (5’). Muy reclamado.
La protesta fue larga. Gozzerino convirtió a la derecha de Mellano.
Al 1-1 (7’) se le sumó la expulsión de Falco por supuesta agresión verbal al juez Murúa, que bien parado (se trasladó muy poco en la cancha, y estuvo lejos de las jugadas, por lo que erró mucho y acertó poco) se bancó el tumulto.
Perdido en su nerviosismo, la “U” casi regala el partido. Es que a los 12’ durmió en una pelota detenida de Gozzerino que Lorca le bajó de cabeza a Bustos, que definió en el área chica y cuando empezó a festejar se dio cuenta que Mellano la había enviado al córner.
Dos minutos después, Gozzerino abasteció a Bustos que desbordó y asistió a Zabala, quien en el punto penal definió a la derecha de Mellano, que volvió a tapar increíblemente. Por Mellano no perdió la U.
Su mérito fue adelantarse, mantener la línea de 3 defensores, y en su peor momento: jugar. Lo hizo bien, y aunque no llegó, confundió al “verde”. Ripa cerró a tiempo a Barengo y lo “acarició” en el área. Era penal. El asistente levantó la bandera, pero el árbitro dijo: “Me aclaró que sólo hubo simulación de parte de los 2 jugadores”.
El “verde” se la jugó al final, pero Mellano voló y le tapó a Gozzerino (37’); voló y le tapó a Zabala (39’). En la definición por penales: Mellano voló y le atajó a Gozzerino; Mellano infló la red. Un “1” con vuelo llevó a la “U” a semifinales.
Síntesis del partido
Rivadavia (AC) 1 - 1 Universitario
Rivadavia: Marcelo Berardo (7); Maximiliano Demarchi (5), Tomás Lorca (6), Tobías Ripa (6) y Andrés Vincenti (5); Javier Demarchi (5), Ignacio Requena (7), Franco Gozzerino (6) y Joaquín Pereyra (6); Maximiliano Bustos (7) y Jonathan Zabala (7). D.T.: Jorge Peñaloza.
Universitario: Simón Mellano (10); Lucas Layús (6), Pablo Piccotti (6), Federico Falco (4) y Franco Gorozo (5); Juan Acosta (6), Luciano Antonino (7), Rodrigo Aguirre (5) y Francisco Monetto (6); Gastón Moyano (5) y Lucas Barengo (6). D.T.: Luis Fassi.
Goles: P.T. 17’ Francisco Monetto (U). S.T. 7’ Franco Gozzerino, de penal (R).
Cambios: S.T. 11’ Leandro Aris (5) por Javier Demarchi (R); y 39’ Cristian Sanabria por Gorozo (U).
Suplentes: Matías Marenco, Tomás Abrile, Matías Bendazzi y Tomás Ribba (R); y Gastón Martínez, Juan Goia, Daniel Cepeda y Gonzalo Acosta (U).
Expulsado: S.T. 8’ Falco (U).
Amonestados: Aris, Maximiliano Demarchi y Lorca (R); y Piccotti y Gorozo (U).
Árbitro: Emanuel Murúa.
Asistentes: Rodrigo Frías y Bruno Cueva.
Cuarto juez: Gastón Ambrossino.
Reserva: San Lorenzo de Las Perdices 0 - Universitario 1 (Nicolás Ceballos).
Estadio: Rivadavia.
Definición por penales: Rivadavia (3): Convirtieron Zabala, Aris y Lorca. Mellano le contuvo a Gozzerino. Marró Vincenti.
Universitario (4): Convirtieron: Antonino, Sanabria, Barengo y Mellano. Se estrelló en el travesaño el disparo de Moyano.
Edgar Scauso. Redacción Puntal Villa María
Comentá esta nota
El arquero de la “U” hizo todo lo que un humano puede y hasta lo que quizás les correspondía hacer a sus compañeros: atajó 4 pelotas con destino de gol, atajó un penal en la serie definitiva desde los 11 metros y convirtió el que ejecutó.
Esa fantástica tarea del arquero marcó la diferencia en el duelo que Universitario terminó ganándole a Rivadavia, que sin brillar, futbolísticamente fue más que la “U”.
El resultado final, la fría estadística, dirá que Universitario empató 1-1 en Arroyo Cabral, tras empatar 0-0 en “El Campus” y que en la serie de penales se impuso la “U” por 4-3. Pero el “verde” fue más.
En caliente, como el buen futbolero debe sentir este maravilloso deporte, habrá que coincidir lo que Peñaloza dijo: “Con Mellano hoy no se podía. Atajó 10 puntos”.
Ese reconocimiento es justo. Lo que no tiene demasiadas explicaciones es el pasaje, más allá de que en determinado momento la serie se le presentó a la “U” y que su mayor mérito (no tanto como lo que tiene su arquero, pero vale la pena reconocérselo al equipo) fue ir al frente en el momento más adverso, cuando le empataron y se quedó con un hombre menos por la expulsión de Federico Falco.
La “U” enfrentará en semifinales a River Plate, y a más de uno se le escapó ayer en Cabral, donde todos especulaban con disfrutar de su clásico en semifinales, que “tiene la suerte del campeón”.
Por la suerte, o por los reflejos del “1”, la “U” se metió entre los 4, y plantel le sobra. Como será que se dio el lujo de ceder 4 futbolistas (Pratti, Sosa, Kamienski y Wartel) y al DT (Joselito Bernadó) al Seleccionado Argentino para disputar las Olimpíadas Universitarias en Nápoles, e igual clasificó en la Liga.
Ayer no le sobró nada, o mejor dicho, le sobró arquero. En la primera etapa, Mellano casi no participó, aunque Rivadavia ya había jugado mejor que la “U”, que se retiró a los vestuarios ganando 1-0, por un gol de Francisco Monetto.
El “10” encontró el gol cuando su equipo poco había ofrecido y sólo había mostrado orden. Un pelotazo mal despejado por Vincenti le quedó a Acosta, que envió un centro al medio del área, donde apareció Moyano para abastecer a Monetto, quien definió cruzado con clase, contra el palo derecho.
El 1-0 a los 17’ era injusto. El fútbol no es justo, y el gol no encontraba motivos para reconocerle a la “U” esa mínima diferencia.
El “verde” (sin el lesionado Bendazzi) había intentado con la velocidad de Bustos hiriendo por los dos extremos y otorgándole protagonismo a Zabala. Quizás le faltó más juego asociado, lo que también es mérito de Antonino y Aguirre, que se desgastaron para impedir a Gozzerino ser un actor principal del cotejo, y aunque Pereyra se las ingenió para aportar abastecimiento a sus dos puntas, faltó la claridad habitual de Demarchi, y hubo poca proyección de los laterales. Le alcanzó con Requena para apoderarse del balón, y alguna corrida de Bustos, pero no había profundidad, y si el 0-0 era un castigo, el 0-1 resultaba cruel.
Intentó empujar Lorca, pero elevó (18’). Empujó Requena, pero al habilitar a Zabala, el travesaño le negó el empate, y Bustos definió suave a las manos de Mellano (20’). La “U” no se inquietó. Si bien encontró otra pelota perdida en el área, y Aguirre desvió (21’), su libreto indicaba que era una serie de 1 gol, y ya lo había convertido.
Lo defendió bien. Rivadavia sólo lo hizo sufrir con un centro de Gozzerino que Vincenti cabeceó solo y apenas desviado en el segundo palo. El “verde” se desesperó, y Monetto tuvo su segunda oportunidad, al recibir de Barengo, pero esta vez elevó. Con el 50% alcanzó.
Esa efectividad era la diferencia de la serie. Rivadavia tuvo que modificar, ir a buscar el partido. Empezar a desordenarse para desordenar a un rival que vivía en la comodidad y el confort que le ofrecía el resultado. Un pelotazo largo encontró a Piccotti cubriendo bien la corrida de Zabala, pero al enganchar hacia el medio le sirvió el balón a Bustos, que llegó antes que el cierre del defensor, que le cometió penal (5’). Muy reclamado.
La protesta fue larga. Gozzerino convirtió a la derecha de Mellano.
Al 1-1 (7’) se le sumó la expulsión de Falco por supuesta agresión verbal al juez Murúa, que bien parado (se trasladó muy poco en la cancha, y estuvo lejos de las jugadas, por lo que erró mucho y acertó poco) se bancó el tumulto.
Perdido en su nerviosismo, la “U” casi regala el partido. Es que a los 12’ durmió en una pelota detenida de Gozzerino que Lorca le bajó de cabeza a Bustos, que definió en el área chica y cuando empezó a festejar se dio cuenta que Mellano la había enviado al córner.
Dos minutos después, Gozzerino abasteció a Bustos que desbordó y asistió a Zabala, quien en el punto penal definió a la derecha de Mellano, que volvió a tapar increíblemente. Por Mellano no perdió la U.
Su mérito fue adelantarse, mantener la línea de 3 defensores, y en su peor momento: jugar. Lo hizo bien, y aunque no llegó, confundió al “verde”. Ripa cerró a tiempo a Barengo y lo “acarició” en el área. Era penal. El asistente levantó la bandera, pero el árbitro dijo: “Me aclaró que sólo hubo simulación de parte de los 2 jugadores”.
El “verde” se la jugó al final, pero Mellano voló y le tapó a Gozzerino (37’); voló y le tapó a Zabala (39’). En la definición por penales: Mellano voló y le atajó a Gozzerino; Mellano infló la red. Un “1” con vuelo llevó a la “U” a semifinales.
Síntesis del partido
Rivadavia (AC) 1 - 1 Universitario
Rivadavia: Marcelo Berardo (7); Maximiliano Demarchi (5), Tomás Lorca (6), Tobías Ripa (6) y Andrés Vincenti (5); Javier Demarchi (5), Ignacio Requena (7), Franco Gozzerino (6) y Joaquín Pereyra (6); Maximiliano Bustos (7) y Jonathan Zabala (7). D.T.: Jorge Peñaloza.
Universitario: Simón Mellano (10); Lucas Layús (6), Pablo Piccotti (6), Federico Falco (4) y Franco Gorozo (5); Juan Acosta (6), Luciano Antonino (7), Rodrigo Aguirre (5) y Francisco Monetto (6); Gastón Moyano (5) y Lucas Barengo (6). D.T.: Luis Fassi.
Goles: P.T. 17’ Francisco Monetto (U). S.T. 7’ Franco Gozzerino, de penal (R).
Cambios: S.T. 11’ Leandro Aris (5) por Javier Demarchi (R); y 39’ Cristian Sanabria por Gorozo (U).
Suplentes: Matías Marenco, Tomás Abrile, Matías Bendazzi y Tomás Ribba (R); y Gastón Martínez, Juan Goia, Daniel Cepeda y Gonzalo Acosta (U).
Expulsado: S.T. 8’ Falco (U).
Amonestados: Aris, Maximiliano Demarchi y Lorca (R); y Piccotti y Gorozo (U).
Árbitro: Emanuel Murúa.
Asistentes: Rodrigo Frías y Bruno Cueva.
Cuarto juez: Gastón Ambrossino.
Reserva: San Lorenzo de Las Perdices 0 - Universitario 1 (Nicolás Ceballos).
Estadio: Rivadavia.
Definición por penales: Rivadavia (3): Convirtieron Zabala, Aris y Lorca. Mellano le contuvo a Gozzerino. Marró Vincenti.
Universitario (4): Convirtieron: Antonino, Sanabria, Barengo y Mellano. Se estrelló en el travesaño el disparo de Moyano.
Edgar Scauso. Redacción Puntal Villa María