La cava de barrio Botta es un pozo cavado en la tierra que data de los tiempos de la autopista. Con el paso del tiempo, el pozo devino en basural. Pero cosa curiosa, no sólo se encuentran en su interior bolsas con desperdicios sino también perros vivos y muertos, familias enteras de canes sin casa; viejos amigos abandonados por manos crueles a la inclemencia del tiempo y las enfermedades; una suerte de tumba para que algunas hembras que acaban de parir empiecen a morirse con sus crías. Ese fue el panorama que, periodistas de este medio, fotografiaron hace un mes. Sin embargo, la cava no es el único “depósito canino”. Los hay en la periferia de las dos Villas. Y para hablar de eso este matutino decidió entrevistar a una proteccionista todo terreno y “todo territorio”; Analía Serra, la fundadora de “Hocicos mimosos”.
“El tema de los perros abandonados es permanente. Nosotros trabajamos todo el tiempo en el rescate. Si bien hay puntos más conflictivos y lugares donde abandonan más, el problema se extiende a toda la ciudad. En barrio Botta, por ejemplo, detectamos dos hembras callejeras y sacamos turno en el CAM (Centro de Adopción de mascotas del Municipio) para castrarlas. Pero una apareció muerta y la otra golpeada. No sólo abandonan animales sino que, además, los maltratan y golpean”.
-¿Cuál sería, a tu criterio, la solución?
-Creo que todo se reduce a tomar conciencia del dolor del otro, en este caso del animal abandonado. Y ese es un tema de educación, de hacer charlas en las escuelas con los chicos pero también castigar con penas más severas a los culpables. Porque hay gente que mata y abandona perros o caballos y no les pasa nada.
-¿Ha crecido la concientización sobre el proteccionismo con el Facebook?
-No sé si ha crecido. Lo que te puedo decir es que el proteccionismo y la palabra proteccionista se puso de moda, pero pocos se involucran. Nosotros tenemos mucha colaboración de amigos y referentes en los barrios, pero a la gente le cuesta terminar de involucrarse del todo. Las redes sociales comparten y visibilizan los animales, pero los que siempre accionan somos los mismos grupos, los cuatro o cinco que hay en las dos Villas.
-Hace poco hubo un caso muy resonante en Villa Nueva...
-Sí, y nosotros participamos. Fue en calle Tucumán, donde un señor que vivía solo y hacía una gran tarea de rescate falleció, dejando más de 30 perros en su casa. Cuando llegamos ya era tarde porque se habían muerto más de la mitad. La gente denunciaba pero no tomaban la iniciativa. Al punto que nos terminaron avisando tarde.
-¿Algún otro factor que a tu criterio haga al abandono?
-Sí, que no hay adopciones. La gente sigue comprando perros de raza y los que rescatamos ya no tenemos a dónde ponerlos. Yo tengo 16 perros y en el CAM hay más de 200. Un principio de solución es trabajar en conjunto. Así fue el caso de la calle Tucumán. Trabajamos desde “Hocicos mimosos” con el Municipio de Villa Nueva y el de Villa María pero también con los bomberos. Por eso pudo resolverse el problema. Hacen falta recursos pero también conciencia y cariño por los perros; que tanto nos quieren y nos necesitan”.
Iván Wielikosielek. Redacción Puntal Villa María
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-¿Cuál sería, a tu criterio, la solución?
-Creo que todo se reduce a tomar conciencia del dolor del otro, en este caso del animal abandonado. Y ese es un tema de educación, de hacer charlas en las escuelas con los chicos pero también castigar con penas más severas a los culpables. Porque hay gente que mata y abandona perros o caballos y no les pasa nada.
-¿Ha crecido la concientización sobre el proteccionismo con el Facebook?
-No sé si ha crecido. Lo que te puedo decir es que el proteccionismo y la palabra proteccionista se puso de moda, pero pocos se involucran. Nosotros tenemos mucha colaboración de amigos y referentes en los barrios, pero a la gente le cuesta terminar de involucrarse del todo. Las redes sociales comparten y visibilizan los animales, pero los que siempre accionan somos los mismos grupos, los cuatro o cinco que hay en las dos Villas.
-Hace poco hubo un caso muy resonante en Villa Nueva...
-Sí, y nosotros participamos. Fue en calle Tucumán, donde un señor que vivía solo y hacía una gran tarea de rescate falleció, dejando más de 30 perros en su casa. Cuando llegamos ya era tarde porque se habían muerto más de la mitad. La gente denunciaba pero no tomaban la iniciativa. Al punto que nos terminaron avisando tarde.
-¿Algún otro factor que a tu criterio haga al abandono?
-Sí, que no hay adopciones. La gente sigue comprando perros de raza y los que rescatamos ya no tenemos a dónde ponerlos. Yo tengo 16 perros y en el CAM hay más de 200. Un principio de solución es trabajar en conjunto. Así fue el caso de la calle Tucumán. Trabajamos desde “Hocicos mimosos” con el Municipio de Villa Nueva y el de Villa María pero también con los bomberos. Por eso pudo resolverse el problema. Hacen falta recursos pero también conciencia y cariño por los perros; que tanto nos quieren y nos necesitan”.
Iván Wielikosielek. Redacción Puntal Villa María
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