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Reducción: por primera vez en su historia, suspenden los festejos del Cristo de la Buena Muerte

El Obispado de Río Cuarto emitió un comunicado en el informa la decisión adoptada debido a la emergencia sanitaria por el Covid-19. Se estima que la celebración se realizará en septiembre próximo

Por primera vez en toda su historia, la celebración de mayo en honor al Cristo de la Buena Muerte, en Reducción, quedó suspendida ante la emergencia sanitaria por el Covid-19.

Mediante un comunicado que lleva la firma del obispo diocesano Adolfo Uriona y del rector del Santuario de Reducción, presbítero Daniel Gallardo, se informó a la comunidad que los actos previstos para los días 1, 2 y 3 de mayo quedan suspendidos, al tiempo que invitan a los fieles a celebrar, cada uno según sus posibilidades, en sus casas.

Esta fiesta religiosa es una de las más convocantes en toda la provincia de Córdoba y el país. Ante la emergencia sanitaria y la obligatoriedad de evitar aglomeraciones se llegó a esta disposición.

Se estima que toda celebración vinculada con esta advocación se trasladará al 14 de septiembre, en coincidencia con el Día de la Exaltación de la Cruz y en el cual el pueblo cumplirá 329 años.

Tras conocerse la decisión del Obispado, el gobierno municipal de Reducción, que es partícipe de la organización de esta celebración, adhirió a tal resolución y acompaña la propuesta de reprogramarla para septiembre próximo como fecha tentativa, y realizarla de manera conjunta con las actividades previstas por un nuevo aniversario fundacional de la comunidad.

La Municipalidad, además, informó que se pondrá en contacto con comerciantes, artesanos y puesteros que ya habían reservado su espacio para ser parte de la feria callejera y coordinar con ellos la reserva para la futura celebración.

Más allá de que hoy la prioridad es respetar la disposición adoptada ante la emergencia sanitaria, para Reducción la suspensión de este tradicional encuentro tendrá su impacto económico, particularmente para instituciones y vecinos que colaboran en esta fiesta brindando servicios y obteniendo con ello sus ingresos.

“Hay quienes para esta fiesta logran hacerse de algunos ingresos brindando asistencia con alimentos, cuidando vehículos o alojando peregrinos que llegan de todo el país”, mencionaron.

No existen antecedentes históricos de la suspensión total de la fiesta cristiana en más de tres siglos de existencia.

Hubo acontecimientos climáticos que incidieron en la afluencia de fieles; no obstante, siempre la devoción popular se impuso ante cualquier situación de lluvias o fríos intensos.

La historia de la devoción

La devoción por el Cristo de la Buena Muerte data de siglos.

Los historiadores dan cuenta que la imagen fue donada por el fundador del pueblo, capitán Francisco Domingo Zarco. Sobre la cruz, señalan que sería obra del escultor filipino Esteban Sampzon, quien vivió en el Río de la Plata entre fines del siglo XVIII y principios del siglo XIX y dejó una vasta obra en Buenos Aires y Córdoba.

En tanto, la primera capilla debió construirse entre 1795, el año de fundación, y 1800.

Esta primera capilla tenía la arquitectura típica de la zona pampeana en esa época, muros de adobe y techo de varazón y paja, por lo que necesitó continuos trabajos de reconstrucción, como los que en 1844 realizó Cayetano Fernández.

En 1869, el sacerdote italiano Fray Quírico Porreca emprendió una nueva reconstrucción.

Hacia 1878, los padres franciscanos de Propaganda llegados de Italia iniciaron la construcción de un nuevo templo que se habilitaría en 1879 y es el que existe actualmente.

Suspensión en San Luis

Por otra parte, en consonancia con la emergencia sanitaria, el gobierno de San Luis ya sobre finales de marzo decidió suspender las tradicionales fiestas en honor al Santo Cristo en Villa de la Quebrada y Renca.