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Falta poco para el verano, pero no hay certezas sobre la apertura de las piletas

En algunos días se presentará un protocolo ante el COE Central para que los espacios recreativos se habiliten en diciembre. Dicen que se pueden desarrollar las actividades propias de la temporada respetando ciertas pautas

A pocas semanas del inicio de la temporada de verano, no hay certezas sobre la apertura de las piletas para actividades de natación y recreativas en medio de la pandemia. Si bien se espera que la cámara que agrupa a los natatorios de Córdoba presente un protocolo de trabajo ante el Centro de Operaciones de Emergencias (COE) Central para que se logre una habilitación, todavía no está claro qué sucederá.

En ese marco, las autoridades municipales de Río Cuarto aguardan una resolución del organismo provincial para definir los pasos a seguir con los natatorios y las colonias de vacaciones de la ciudad.

Uno de los referentes de la asociación que nuclea a las piletas de la provincia dijo a Puntal que tienen la expectativa de abrir en diciembre.

“Todavía no tenemos novedades. Estamos trabajando en la construcción de un protocolo para iniciar las actividades en diciembre. En principio, nos recibirían la semana que viene (miembros del COE Central). Entendemos que se pueden aplicar medidas de bioseguridad similares a las que se están fijando para los ríos y las playas”, aseguró.

Estrategia

Por su parte, Gabriela Ordóñez, directora de la escuela de guardavidas Amgaa en Río Cuarto, manifestó a Puntal que es necesario que se implemente una estrategia para que las piletas puedan abrir, a los fines de que las personas tengan un lugar para pasar su tiempo libre en la temporada que se viene.

“La Nación aún no habilitó los natatorios ni las colonias. Actualmente, en el Centro 11, estamos trabajando con un protocolo que podría adaptarse para las piletas recreativas. Las personas que ingresan a las piletas circulan por un andarivel determinado y mantienen distancia social. La actividad se extiende durante 45 minutos y, antes de que ingrese otra persona, se llevan adelante todas las tareas sanitizantes. Además, la gente que ingresa a la pileta no se cruza con la que sale”, explicó Ordóñez.

-¿Qué se podría hacer con las piletas recreativas?

-Yo pondría andariveles para que cada uno que ingresa a la pileta salga por el mismo lugar. Haría espacios en cuadrados de dos metros cuadrados para que la persona se mueva en ese lugar. La cantidad de personas a ingresar debería ser proporcional a la cantidad de metros de la pileta. Por otro lado, también habría que regular el número de personas que ingresan a los predios y el tiempo de permanencia dentro del agua, más allá de todas las otras medidas de bioseguridad. Es importante que se dé el debate. Hay que aprender a convivir con el virus.