La acción se desprendió de una investigación que tiene en su poder la Fiscalía Federal de Villa María, hoy conducida por María Marta Schianni.
Siguiendo las directivas de la magistrada, efectivos de la División local de la Policía Federal Argentina irrumpieron en diferentes domicilios del sector norte de la ciudad.
Los allanamientos, puntualmente, se localizaron en los barrios Nicolás Avellaneda y San Martín.
En el primer sector, la fuerza se desplegó en una vivienda ubicada sobre calle Patagones, donde se presume que se almacenaban drogas y dinero.
Lo mismo ocurrió en un complejo de departamentos de calle Brandsen, en barrio San Martín, hasta donde llegaron los uniformados buscando evidencias vinculadas a esta misma causa.
Durante el procedimiento, los agentes secuestraron más de 4 kilos de cocaína, 15.500 dólares y varios vehículos relacionados con los investigados.
Además, se llevaron a cabo requisas personales y el decomiso de elementos probatorios de relevancia para la investigación.
El momento más tenso del operativo giró en torno a la detención de dos personas, sospechadas de integrar la banda investigada.
Fuentes cercanas a la investigación indicaron que los detenidos tendrían roles activos dentro de una red dedicada a la distribución de drogas en Villa María y otras ciudades de la región.
El caso que hoy sigue de cerca la Justicia federal se originó tras intervenciones telefónicas y tareas de inteligencia desarrolladas por la Policía Federal, que permitieron identificar movimientos sospechosos y viajes frecuentes hacia otras localidades para el abastecimiento de estupefacientes.
La coordinación entre la Fiscalía y la fuerza federal posibilitó realizar un seguimiento minucioso de las maniobras delictivas, lo que derivó en los allanamientos, realizados a altas horas de la noche.
Las sospechas llevan a pensar que la causa podría tener más gente vinculada al delito de venta de estupefacientes.
Es por ese motivo que la Fiscalía de Villa María sigue recolectando pruebas para avanzar en el esclarecimiento de los hechos y lograr la desarticulación total de la estructura delictiva.
La marca del delfín
Llamó la atención de la Policía Federal el sello que llevaban los ladrillos secuestrados, figura que se aprecia en una de las imágenes que la Fiscalía le hizo llegar a este matutino.
La forma es la de un delfín, distintivo que le da a sus cargamentos de cocaína el capo narco salteño Delfín Reinaldo Castedo, más conocido como el “Patrón del Norte”.
Las marcas en los panes secuestrados indicarían -en el código narco- el cártel al que pertenecen, como una suerte de certificado de garantía de calidad.