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Café al paso, la única manera de los bares para sobrevivir a la crisis

Algunos ya sacan mesas afuera para que la gente detenga su marcha y pare a tomar una infusión. Temen que la crisis sanitaria los obligue a cerrar sus puertas

En los últimos días, a partir de mayores flexibilizaciones, el centro de la ciudad recuperó su fisonomía habitual: cientos de personas caminando por las calles, dársenas ocupadas todo el tiempo, negocios abiertos y un ritmo bastante similar al conocido hasta el 20 de marzo.

Sin embargo, hay una imagen que no logra cambiar. Los bares y restaurantes semi-cerrados, sin mesas afuera ni atención en el interior, pero con el café al paso como única alternativa para sobrevivir.

El 73,5% manifestó que trabaja con la mitad o menos de su personal de acuerdo a una encuesta que difundió Aerca, y el sindicato teme que la sangría de trabajadores continúe en caso de prolongarse la cuarentena.

Mientras ya aparecen proyectos para su reapertura, como el presentado días atrás por la oposición, otros decidieron no esperar y se las ingenian para aumentar sus ventas sin violar la cuarentena.

Por caso, ya se pueden observar varios bares de la zona céntrica que sacan mesas afuera, sin las sillas, para que los transeúntes se detengan a tomar su café al paso. Otros incluso se animan a sacar algunas sillas, para que los mayores de edad se sienten un instante.

“Es la única manera de sobrevivir, muchos están pensando en cerrar si esto se prolonga más tiempo”, le dijo un comerciante del rubro a este diario, y la realidad marca que llevan casi tres meses sin abrir las puertas.

Solamente se les permitió vender a través de delivery o la modalidad “para llevar”, y el café al paso se enmarca en una de estas alternativas, aunque “no alcanza para cubrir los gastos”, aclaró este empresario.

Las imágenes de los últimos días permitieron observar cómo la gente se detuvo frente a los cafés, se acercó a las mesas, degustó una infusión para calentar el cuerpo y luego siguió. El “cafecito” de la mañana es un ritual de los villamarienses que, ante la nula circulación comunitaria del virus, probablemente regrese en poco tiempo. Por ahora, sólo al paso.

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