La coordinadora del centro comunitario Caritas Felices, espacio que desde hace más una década funciona como comedor y merendero en el corazón de barrio La Calera, hizo pública en las últimas horas su preocupación por la gran cantidad de niños y niñas que llegaron por un plato de comida.
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"Cada vez me duele más esta realidad"
La titular del comedor Caritas Felices contó que el lunes a la noche unos 90 niños fueron a su espacio por un plato de comida, cantidad que la dejó preocupada. "Es lo que se vive día a día", manifestó
“Quiero contarles que me siento triste, anoche tuvimos 90 niños”, expuso la referente barrial Marisa Sánchez.
Y agregó:“Cada vez me duele más esta realidad, pero es lo que se vive día a día. “Gracias a Dios y a toda la gente que nos ayuda para que no nos falten los alimentos, espero podamos seguir”.
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