“La querella considera que los elementos recolectados en el proceso son más que suficientes para imputar y detener a los nueve oficiales superiores que participaron de la fiesta de bautismo”, señaló el abogado Enrique Novo, quien integra el equipo representa a la familia de Matías Chirino junto con sus pares Claudio Orosz y Neris Fuceneco.
Novo afirmó que con lo que hay “en el sumario militar es más que suficiente para darlos de baja”.
Chaile y Meza señalaron que también son víctimas y que podrían haber terminado como Matías Chirino.
Chirino murió como consecuencia de la fiesta de iniciación realizada el pasado 19 de junio en el predio del Grupo de Artillería de Monte 3 de Paso de los Libres, al ser obligado a tomar alcohol en exceso, sumado a otros maltratos que sufrieron el joven de Holmberg y los otros dos compañeros que tenían como primer destino ese regimiento.
Ayer se inició la etapa de las testimoniales con los subtenientes que llegaban a Paso de los Libres como primer destino luego de la formación en El Palomar.
Los primeros dos testigos estuvieron casi siete horas declarando y coincidieron en que “fueron obligados a ir dos días antes de lo que estaba previsto porque si no comenzarían con el ‘pie izquierdo’ y que fueron obligados a comprar comida y bebida alcohólica en exceso”.
Son dos testimonios claves dentro de la investigación que lleva adelante el fiscal federal de Paso de los Libres, Fabián Martínez.
El padre de Matías, Ezequiel Chirino, siguió por videoconferencia las declaraciones de los dos compañeros de su hijo que también participaron de la fatídica fiesta.
“Los trataron muy mal por llegar más tarde del horario impuesto para que comiencen a hacer el asado, se burlaron por ir con parientes a Paso de los Libres y también de sus defectos físicos”, señaló Novo.
Los subtenientes precisaron ante la Justicia Federal que “los obligaron a beber de cada uno de los vasos que preparaban los oficiales superiores (algunos eran con vino y mucha sal) y también a comer fideos con un gusto muy feo (no saben lo que les pusieron)”, remarcó Novo.
Noche fría
Los subtenientes Jorge Chaile y Ezequiel Meza señalaron que fueron obligados a tirarse a una pileta con agua helada y en el caso de Chirino “lo obligaron a ir a comprar más bebidas y cigarrillos” y cuando regresó se “ensañaron” con él por haberse demorado y supuestamente aprovechar para no tomar tanto alcohol, por lo que “lo hicieron tomar más de la cuenta”.
Novo detalló que los compañeros de Matías recordaron ante la Fiscalía Federal de Paso de los Libres que los nueve oficiales que los hicieron ir dos días antes de su presentación “los hacían cantar y si se confundían la letra los manijeaban”.
El abogado riocuartense recordó que los amigos de Matías acompañaron a su padre a trasladar su cuerpo hasta Holmberg y, cuando regresaron, esos mismos oficiales superiores los volvieron a destratar como si nada hubiera pasado.
Los abogados de la familia Chirino insisten en que hay elementos suficientes para imputar y detener a los nueve oficiales superiores que maltrataron a los jóvenes militares, mientras que el Ejército tiene todos los elementos para darlos de baja.
“No sabemos qué están esperando las autoridades judiciales y militares. La familia Chirino considera que si hubieran actuado a tiempo tal vez lo de Michel Verón (caso del joven que sufrió una grave lesión en la columna vertebral en una ceremonia de bautismo en el regimiento de Apóstoles) se habría evitado”, remarcó Novo.
Por último, Novo sostuvo que los jóvenes subtenientes “se consideran víctimas y dijeron que podían haber terminado como Matías”.