A primeras horas de la mañana de ayer, llamó la atención de vecinos y vecinas de Villa María y Villa Nueva el gran despliegue que llevaron a cabo distintas fuerzas de seguridad provinciales con motivo de hacer cumplir el decreto que establece el aislamiento social, preventivo y obligatorio.
Durante las horas de mayor movimiento vehicular y de personas, la Fuerza Policial Antinarcotráfico (FPA) de Córdoba y la Policía de la Provincia controlaron ayer diferentes comercios de las mencionadas ciudades.
Según la información que llegó a este matutino desde ambas instituciones, el personal operó e ingresó en compañías de seguros, negocios de telefonía, de motopartes y mayoristas, en una vinoteca y también en una concesionaria -entre otros locales-.
Amparados en el decreto nacional 297/20 (que establece la cuarentena), las fuerzas de seguridad actuantes obligaron al cierre de los puntos de ventas que infringían la ley.
Desde la Unidad Regional Departamental General San Martín (URDGSM) informaron también la aprehensión de varias personas: son los casos de aquellas que -como ya es costumbre en el día a día- no pudieron explicar el porqué de su paseo.
Operativos
Uniformados de la FPA, dirigidos por el Ministerio Público Fiscal (MPF), llevaron a cabo por la mañana diversos operativos en Villa María y Villa Nueva, con el fin de hacer cumplir lo dispuesto por el Ejecutivo Nacional.
A este medio llegaron fotos y videos de procedimientos en el centro de esta ciudad. ¿El más llamativo? El desarrollado en una reconocida vinoteca de calle Mitre al 100.
Dichas fuerzas también operaron en una concesionaria de motocicletas, ubicada sobre Bv. Alvear; en un mayorista ubicado sobre Avenida Carranza al 800 y en un local de motopartes, ubicado también sobre la misma arteria (ambos comercios de la vecina ciudad).
Con el mismo fin, personal de la URD General San Martín se hizo presente en dos compañías villamarienses de seguros (una situada en la esquina de Alem y La Rioja, y otra, sobre Catamarca al 1130); en un local del rubro telefonía (sobre General Paz al 50); y por último, en un café ubicado en la esquina de bulevar Boiero y calle Córdoba, (éste último emplazado en la localidad de Arroyo Cabral).
El personal pudo constatar en cada uno de los negocios mencionados que la actividad laboral estaba siendo llevada a cabo con total normalidad y que los respectivos rubros no se encontraban exceptuados a la normativa nacional.