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Los cordobeses y el veto de Milei: hubo 11 votos en contra, 6 a favor y 1 ausencia

Los justicialistas Gutiérrez, Aresca y De la Sota y el democristiano Brügge votaron en contra, al igual que Agost y Baldassi (Pro) y Estévez y Carro (UP). También lo hicieron así De Loredo, Brouwer y Carrizo. Pero Picat, Machado y Avico votaron a favor, como Bornoroni, Ponce e Ibáñez. Torres estuvo ausente

¿Cómo votaron ayer los diputados cordobeses el veto del presidente Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario?

En rigor, hubo 11 votos en contra, 6 a favor y 1 ausencia.

Los diputados justicialistas Carlos Gutiérrez, Ignacio García Aresca y Natalia de la Sota y el democristiano Juan Brügge votaron en contra, al igual que Oscar Agost Carreño y Héctor Baldassi (Pro) y Gabriela Estévez y Pablo Carro (UP).

También lo hicieron de esa manera los radicales Rodrigo de Loredo, Gabriela Brouwer de Koning y Soledad Carrizo.

Pero Luis Picat (UCR), Laura Rodríguez Machado y Belén Avico votaron a favor, como Gabriel Bornoroni, María Celeste Ponce y Cecilia Ibáñez.

La peronista Alejandra Torres estuvo ausente por enfermedad: “Debido a que estoy transitando problemas de salud, entre ellos Covid, no podré asistir a la sesión de mañana (por el miércoles), donde debatiremos el veto a la Ley de Financiamiento Universitario. Quiero reafirmar mi postura sobre este tema: las universidades son el pilar y el futuro de nuestra sociedad. No podemos concebir un país con universidades desfinanciadas. Por ello, rechazo el veto a la Ley de Financiamiento Universitario”.

En el marco de la votación, el diputado Gutiérrez dijo: “La educación superior pública y de calidad es la herramienta para la movilidad social ascendente, es donde están y se preparan los recursos para que el país se potencie, desarrolle y progrese. La discusión en términos de grieta vuelve a impedir una discusión seria sobre el futuro de las universidades. Bien lo sabemos en Córdoba, donde la articulación entre el sistema productivo, el complejo universitario y el complejo científico técnico es causa y consecuencia de un entramado virtuoso del que resultan puestos de trabajo, productividad, desarrollo científico-tecnológico y creatividad. Se equivoca el gobierno nacional cuando confunde cuestiones de tipo administrativo que no hacen otra cosa que esconder su rechazo a la educación pública, a la que no podemos desfinanciar porque es precisamente la principal herramienta para salir de la decadencia”.

También el gobernador Martín Llaryora se pronunció “en defensa de la universidad pública”.

El ministro Luis Caputo aprovechó un posteo de la diputada Alejandra Torres, para reafirmar la posición oficial: “Estimada Alejandra, tu postura hacia las universidades no es muy diferente a la del gobierno nacional. Nosotros también estamos a favor de las universidades públicas. Sólo queremos que se auditen los gastos, porque la plata es del contribuyente y no nuestra”.