Provinciales | Fiebre Hemorrágica | casos | Hospital

Fiebre Hemorrágica: detectan casos en la provincia y en La Carlota instan a vacunarse

Se confirmó el diagnóstico en dos pacientes, uno de Bell Ville y otro de Laborde. En el Hospital San Antonio realizan inmunizaciones permanentes y señalaron que hay dosis disponibles para personas de entre 15 y 65 años

La aparición de casos de Fiebre Hemorrágica Argentina en el sudeste cordobés causó alarma en toda la región y especialmente en la localidad de La Carlota ya que es zona endémica declarada desde hace varias décadas. Dicha enfermedad afectó fuertemente a toda la jurisdicción durante los años ‘70 y ‘80 , y por ello las autoridades locales llamaron a la prevención por medio de la inmunización. En los últimos días se confirmaron contagios en Bell Ville y Laborde, y esta última población dista a unos 100 kilómetros de territorio carlotense.

Así lo indicó a Puntal la encargada del departamento de Inmunizaciones del Hospital San Antonio, Irma Escudero. La especialista aclaró que en la población no hay casos y subrayó que permanentemente se concientiza sobre la importancia de vacunarse.

“Visitamos todas las escuelas de nivel medio y allí aplicamos las vacunas contra la Fiebre Hemorrágica. Inmunizamos tanto a jóvenes de 15 años, como a personas de hasta los 65 años. Revisamos también las cartillas de vacunación, así es como se previene esta enfermedad”, manifestó la profesional.

En este sentido, aclaró que la dosis se aplica una sola vez y tiene cobertura de por vida. Agregó que la colocación es gratuita y se puede recibir en el Hospital mediante turno. “Debemos tener 10 personas para abrir los frascos ya que una vez abiertos no se pueden guardar, por eso es importante el turno. Vacunamos todas las semanas”, manifestó.

Recalcó que esta vacuna “no produce reacciones y lleva muy pocos minutos su colocación. Debemos evitar que llegue a nuestra región por ser zona endémica y para ello la única manera es inmunizarse y así evitar que la Fiebre Hemorrágica se propague”.

Preocupación en el país

A nivel nacional, también se encendieron las alarmas días atrás, cuando se detectó un fuerte incremento de casos en el sur de Santa Fe y Buenos Aires. Especialistas de la Sociedad Argentina de Infectología (Sadi) advirtieron que la sospecha temprana es clave para administrar el tratamiento con suero y reducir complicaciones y mortalidad.

A su vez, manifestaron que se debe prestar especial atención a los síntomas que en muchos casos podrían confundirse con los de Covid-19.

La enfermedad es producida por el virus Junín (Familia Arenaviridae, Género Arenavirus del Nuevo Mundo, Complejo Tacaribe) que se transmite entre roedores y el reservorio principal es Calomys musculinus y Calomys laucha excepcionalmente (ratón maicero), un animal común en ámbitos rurales, domésticos y en hábitat lineales (caminos, sembradíos o líneas férreas).

El ser humano es un huésped accidental a partir del contacto directo con secreciones y excretas de roedores que se aerosolizan e ingresan por vía respiratoria o piel no intacta.

A partir de la introducción de la vacuna, cada año se informan entre 15 y 50 casos de FHA en Argentina y la mayor incidencia se observa principalmente de marzo a octubre, aunque pueden ocurrir casos todo el año.

La patología se presenta como un síndrome febril agudo inespecífico, sin compromiso de las vías aéreas, y el periodo de incubación es de 1 a 2 semanas.

Entre los signos inespecíficos pueden aparecer fiebre (38,5-39°C), cefalea, dolor retro-ocular, malestar general, cansancio, erupción en la piel (enrojecimiento del tronco superior), sarpullido en membranas mucosas, hemorragia en las encías y dolores articulares.

Luego del octavo día puede desarrollar alteraciones hemorrágicas, renales y neurológicas graves y sin tratamiento la mortalidad alcanza el 30%.

En la etapa aguda las alteraciones del laboratorio principalmente observadas son la leucopenia (descenso de glóbulos blancos), plaquetopenia (disminución de plaquetas) y velocidad de eritrosedimentación normal o baja.