Daniel Bazán, presidente de la entidad, contó que en momentos en que se aprestaba a concluir el entrenamiento de fútbol, los jugadores y allegados constataron que “estaba prendida fuego la utilería. Aparentemente hubo cortocircuito; no sabemos si el termo o la bomba”, explicó.
Y detalló que ardieron algunos elementos deportivos, “ya que otros estaban en la cancha con el profe”. Sobre los daños, indicó que se quemaron “dos termotanques, botines, pecheras. Todo material de utilería, pelotas, botines de los chicos que no tienen y son prestados”.
Pero además, la bomba que lleva agua al tanque para los vestuarios. “Afortunadamente no hubo que lamentar heridos, no explotó nada. Cuando fueron a ver qué ocurría había llamas que salían por todos lados. Y que tampoco llegó a los vestuarios” agradeció.