Al llegar a la sede de la organización (Santa Fe 484), voluntarias comenzaron a notar movimientos extraños como elementos en el suelo y fuera de su lugar habitual. Luego, al salir al patio, observaron que las rejas que se encuentran por fuera estaban violentadas.

“Hicieron palanca de la reja y una parte se rompió. Empezamos a entender esos movimientos dentro de la sede. Nos robaron un celular que es el que utilizamos para avisar que ya está listo su pedido y nada más”, dijo Carla Tais, referente de la organización que dialogó con este matutino.

“Seguramente estaban buscando dinero y ha revuelto el lugar donde tenemos las carpetas con papeles. Más allá de eso, nos queda una fea sensación y nos duele porque nos sentimos invadidos. Siempre que tratamos de darle una mano a quien más nos necesita lo hacemos y eso nos enoja”, dijo Tais, aunque aclaró que ya se están reponiendo de la situación.

De hecho el próximo paso es arreglar la reja que se rompió en el robo. “Nos preocupa porque económicamente a veces no llegamos a sostener ni el alquiler, es gracias a los socios que nos colaboran con su cuota, por eso esto es un gasto más para nosotros y una preocupación que nos dejó esto”, expresó.

Denuncia

Sobre la denuncia del hecho delictivo, la vecina explicó que tras percatarse del robo dio aviso a la policía y le informaron que enviarían un móvil con personal de la Departamental San Martín para inspeccionar el lugar pero que nunca llegó.

“Si necesitaban algo podían acercarse y pedir ayuda, para eso estamos y es el fin de la institución, pero no lo pensaron de esa manera, ni siquiera pensaron en el daño edilicio que nos dejan. Si buscan dinero, no lo hagan más porque nos está constando a nosotros generarlo, así que no hay”, completó Tais.