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Tamberos insisten en que, sin apoyo, la crisis será más grave

El presidente de Coninagro, Carlos Iannizzotto, pasó por Villa María y realizó un análisis de la situación del país. Insistió en que el Estado debe generar medidas para la producción

Una crisis que se profundiza y que ya amenaza a muchas economías regionales de todo el país, como son las que impulsa la lechería.

Carlos Iannizzotto, presidente de Coninagro, pasó ayer por Villa María en donde mantuvo un encuentro con integrantes de la entidad que encabeza, y luego estuvo en Arroyo Cabral, en las jornadas ganaderas organizadas por la Cooperativa de dicha localidad.

El dirigente ruralista insistió en que los problemas se acrecientan día a día para los productores y los industriales lecheros, y remarcó la necesidad que tienen de que sea el Estado Nacional el que se involucre en el tema como para generar medidas que permitan mejorar las condiciones de trabajo.

“La naturaleza no espera. Todos los días los tambos tienen su leche. Todos los días hay costos laborales y de producción. Y vemos que es una situación que cada vez va tomando más dimensión, y no vemos respuestas”, lanzó el dirigente ruralista, quien aseguró que las estadísticas marcan que actualmente cierra en promedio un tambo por día en el país.

Sin respuestas

“Si no tenés acceso al crédito, y hay impuestos que no podés pagar, tenemos una situación muy intolerante en cuanto a la actividad productiva”, reconoció el presidente de Coninagro, quien explicó que dicha situación se la explicaron a funcionarios del Gobierno Nacional, e incluso al presidente Mauricio Macri, aunque sin respuestas.

“Tenemos altos costos, una situación financiera insostenible, presión impositiva por demás de lo que los productores y las pymes pueden afrontar; y que tienen un efecto muy complicado como es la expulsión de productores de la actividad, el cierre de tambos y de usinas. Lo que provoca un impacto en el trabajo, en el empleo”, graficó Iannizzotto en el encuentro que mantuvo con los medios en un hotel céntrico de la ciudad.

“No se pide asistencialismo, sino herramientas que van a impactar en trabajo, empleo e ingreso de divisas al país”, remarcó el dirigente, quien pese a esto insistió en que no recibieron ningún tipo de respuestas positivas por parte de la Nación.

“No hay respuestas, creo, porque apreciamos que hay una impronta muy fuerte a solucionar temas prioritarios como son el déficit fiscal y la inflación”, marcó y agregó que “desde el sector agroindustrial, lo que nosotros le mencionamos al Gobierno, es que debido a las características de nuestra actividad, en donde el productor todo los días tiene que invertir”. “Hay que buscarle una solución al sector más dinamizante y que más recursos le trae al país, en divisas y en trabajo”, dijo.

“No puede ser que se lo descuide en función de un objetivo que no vamos a discutir, pero no puede ser que el ajuste sea del sector privado que está invirtiendo todos los días, mientras no vemos que haya un esfuerzo paralelo del Gobierno en achicar su ineficiencias y el costo de la política”, formuló Iannizzotto, quien agregó que “por suerte el diálogo no se ha cortado. Esperemos que encontremos las respuestas adecuadas de una política diferenciada para la lechería”.

Día a día, menos productores

Según los economistas, y las expectativas marcadas incluso desde el Gobierno Nacional; la economía del país comenzaría a repuntar recién a fines del primer trimestre de 2019, algo que los productores también reconocen, aunque aclaran que, de no mediar ayudas antes, muchos de ellos quedarán en el camino.

“Los productores somos cautivos de nuestra actividad, porque no sabemos hacer otra cosa. A este promedio, lamentablemente no sabemos cuántos podremos llegar a marzo del año que viene”, reconoció el presidente de Coninagro, quien insistió en que el no tomar medidas sectoriales, “no sería inteligente ni estratégico por parte del Gobierno Nacional. Debería haber miradas más estadistas, y comprender que hay toda una región, con un gran impacto social, que se verían perjudicadas enormemente”.

Marcos Giraudo, referente de Coninagro en Córdoba, sumó su visión del momento y agregó que no se trata de un problema exclusivo de la lechería. “Hoy con estas tasas es imposible producir. Y no hay producción que no necesite del crédito”, sostuvo.

Alejandro Buttiero, titular de Coninagro Córdoba, recordó además el impacto grave que tienen las crisis para las localidades del interior, ya que el cierre de tambos no implica la merma de producción lechera, ya que se profundiza la concentración de tambos; pero sí la pérdida de trabajo para mucha gente.

Los dirigentes de Coninagro insistieron en el peso que tienen las cooperativas de productores en las localidades y en las economías regionales en sí.

Las empresas están atravesando momentos bastante complejos a partir de la suba de los costos y la imposibilidad de acceder a créditos para capital de trabajo, por las altas tasas de interés vigentes en la actualidad.

Juan Drovandi.  Redacción Puntal Villa María.

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