El presidente Alberto Fernández viajará esta mañana a la ciudad uruguaya de Montevideo para asumir la Presidencia Pro Tempore del Mercosur, justo cuando el Tribunal Oral Federal número dos dé a conocer el veredicto en la causa Vialidad, que tiene a la vicepresidenta, Cristina Kirchner, como principal imputada.
Además, la Cumbre de Jefes de Estado se producirá en medio de las tensiones políticas que atraviesa el bloque regional, dado que en los últimos días los países miembros quedaron enfrentados a raíz de la decisión de Uruguay de negociar su ingreso al Acuerdo Transpacífico, que lideran Nueva Zelanda y Australia, sin consultar con los países socios del Mercosur.
La Cumbre está prevista para las 10 y se espera que haya nuevos cruces, esta vez entre los mandatarios, luego de que la reunión entre cancilleres se viera marcada por cuestionamientos cruzados.
"Vemos con preocupación que se emprende un camino que parece ser unilateral y que, muy probablemente, podría desembocar en una ruptura", advirtió el ministro de Relaciones Exteriores, Santiago Cafiero, el pasado lunes.
Desde Montevideo, el jefe del Palacio San Martín reclamó que la agenda común del bloque "contemple los intereses exportadores de todos los socios y de todos los sectores productivos".
Los cuestionamientos llegaron luego de que su par rioplatense, Francisco Bustillo, diera un duro discurso de bienvenida.
La tensión entre la administración de Luis Lacalle Pou y Alberto Fernández data de meses, cuando el mandatario uruguayo manifestó sus intenciones de cerrar tratados de Libre Comercio al margen del Mercosur.
En otro pasaje de su exposición, Cafiero subrayó: "La negociación en bloque es más trabajosa y demanda más tiempo, pero estamos convencidos de que la mejor estrategia no es apresurarse a cerrar acuerdos que, luego, profundicen nuestras brechas productivas y científico-tecnológicas con otros Estados o bloques".