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“Lo más difícil es que los padres tomen conciencia de las dificultades de los niños”

La psicopedagoga Soraya Rached sostuvo que los mayores problemas pasan por los inconvenientes para prestar atención

La psicopedagoga Soraya Rached (M.P. 221502) aseguró que en la actualidad las principales dificultades que presentan los niños tienen que ver con problemas para prestar atención. Asimismo, remarcó que lo más difícil es que los padres tomen conciencia de esos inconvenientes. En diálogo con Puntal, la especialista dijo que la intervención del psicopedagogo se da desde el principio y hasta el final de la vida de las personas. 

-¿Cuáles son las principales problemáticas que abordan en los consultorios?

-La psicopedagogía actúa tanto en la escuela como en el consultorio clínico, ya sea privado o el de alguna institución. En las escuelas, lo que se está viendo y, que coincide con lo que después los padres plantean sobre sus hijos cuando los envían a un tratamiento psicopedagógico, pasa por los problemas de atención. No estamos hablando de falta de atención, porque todos prestamos algo de atención, aunque sea mínimamente, nos referimos a grandes interrupciones. Desde hace años venimos viendo que esa situación es reflejo de lo que pasa en los adultos. Es normal ver a un papá con el celular que no le presta atención a su hijo que lo reclama por algo. Es decir, los adultos están pendientes del móvil más que de sus hijos. A veces ocurre lo mismo con los docentes.

-¿Cómo un papá o una mamá se da cuenta que tienen que llevar a su hijo a un psicopedagogo?

-Desde hace casi tres décadas se trabaja muy bien con los pediatras, a quienes les agradecemos. Ellos en la consulta pediátrica les advierten a los papás que algo no está funcionando bien. Los docentes, en el aula, también detectan desde un problema de visión hasta uno de aprendizaje. Lo más difícil es que los papás tomen conciencia de la dificultad. Los papás saben que los problemas están, pero dicen que se está exagerando, que el niño todavía es chiquito o los atribuyen a una cuestión de si es nena o varón. Buscan escusas para escaparse de los problemas. Asimismo, hay que decir que los abuelos y los tíos cumplen un rol muy importante porque también son buenos radares y advierten sobre ciertas cosas. 

-¿Es exagerado que, ante una duda, un padre acuda de inmediato a un psicopedagogo?

-No, para nada. Los padres, especialmente los primerizos, están llenos de miedos. Por eso, es bueno consultar con un profesional porque de esa manera se está previniendo. 

-¿Ven niños con problemas que tienen que ver con dificultades de los adultos, como la situación económica o la crisis social?

-Sí, los problemas de los adultos repercuten mucho en los niños. Como se dice habitualmente, los niños son unas esponjas. Ahora, ellos son los más sanos porque son los que están menos contaminados. Los niños son los más inocentes y tiernos, pero muchas veces son los primeros que marcan lo que está pasando en la casa. 

-¿Hay gabinetes psicopedagógicos en todos los colegios?

-Hace años existían, después fueron desapareciendo y ahora se están incorporando otra vez. Hay un problema muy serio en el Ministerio de Educación al no reconocer en el nivel medio como coordinador de curso al psicopedagogo, pese a que está formado para eso. Desde el Colegio de Psicopedagogos estamos trabajando porque no todas las escuelas cuentan con profesionales. 

-¿Tienen problemas con las obras sociales?

-Sí, hace tiempo que vengo hablando de la necesidad de que, junto a mis colegas, empoderemos a los padres, ya que a ellos las obras sociales les descuentan del 1 al 10 de cada mes. Nosotros, como profesionales, no estamos reconocidos. Tenemos aranceles muy bajos y cobramos con mucho atraso. Nosotros plantemos que los padres reclamen ante las obras sociales, pero nunca los dejamos de atender porque no se pueden cortar los tratamientos. Además, los niños quieren seguir. 

-¿Hay alguna edad para comenzar a asistir a la consulta?

-No, no hay una edad determinada. A la consulta se puede ir desde el principio y hasta el final de la vida. Nosotros, como psicopedagogos, estamos presentes en el aprendizaje del ser humano durante toda su vida.

-Habitualmente se cree que intervienen únicamente en niños…

-Sí, pero no, se interviene en todo momento. De hecho, hay colegas que se han especializado en gerontología. El psicopedagogo trabaja sobre las perturbaciones o problemas en el aprendizaje y los seres humanos estamos aprendiendo constantemente. 

 -Otra de las cuestiones que se repite habitualmente es que es una carrera elegida por las mujeres…

-Son más mujeres, sí. Es lo mismo que sucede con los varones y veterinaria. De todas maneras, hay muchos varones que estudiaron y estudian psicopedagogía y que son excelentes. Hay muchos varones que estudian y que se dedican fuertemente a la educación. 

-¿Ha crecido la cantidad de consultas?

-Sí, ya se dejó de lado la idea de que los que van al psicopedagogo tienen problemas. Se revirtió el paradigma, al igual que con el psicólogo. Hay que saber que cuando antes vayas y pidas auxilio a un profesional se van a evitar males mayores. 



Nicolás Cheetham.  Redacción Puntal

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