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Cinco años de prisión para López

Es la pena que recibió el hombre que en 2018 atropelló y mató a Milla Tejada. También se le impuso una inhabilitación para conducir por ocho años. Había llegado al juicio en libertad

Con una pena de cinco años de prisión efectiva y la inhabilitación para conducir por un término de ocho años, concluyó este miércoles el juicio oral y público que se le hizo a Julián López (52) por el lamentable fallecimiento de Milla Tejada (17), la adolescente que murió en 2018 luego de haber sido atropellada por un automóvil propiedad de la empresa Alem Motors que era conducido por el condenado, quien hasta ayer se encontraba en libertad.

Luego de varias sesiones, la Cámara del Crimen, representada por la vocal Eve Flores de Aiuto, resolvió condenar al imputado López, quien fue declarado autor penalmente responsable del delito de homicidio culposo por la conducción imprudente de un vehículo automotor, agravado por haberse dado a la fuga.

La pena que se le impuso al encartado coincidió con el tiempo de encierro solicitado previamente por el fiscal de Cámara Francisco Márquez; sin embargo, difirió en lo que respecta a los años de inhabilitación para conducir (el magistrado quería que López no maneje por un plazo de 10 años).

Antes de pasar a la sentencia, y en la parte de los alegatos, los abogados de López, Pablo Maccarini y Leonel Gómez, habían solicitado que su defendido sea absuelto. Por su parte, el abogado querellante, Gastón Nicola, había requerido que López sea condenado por homicidio simple con dolo eventual y reciba una pena de 9 años de prisión.

Al momento de su alegato, Márquez acusó a López de “mentiroso” por haber declarado que la joven fallecida se conducía en moto “sin luz y sin casco”. Sobre este tema, el fiscal fue categórico: “No hay ningún testigo que diga que venía sin casco, y su madre cuando declaró dijo que las luces funcionaban bien”.

También precisó que Milla “venía por la derecha”, “tenía prioridad de paso” y “circulaba en un vehículo menor”. Además, destacó que en la esquina del choque “había mucha luz”, descartando de esa manera la posibilidad de que no haya sido vista por López.

Márquez también recordó que el condenado no tenía autorización para manejar el Toyota Etios que le pertenecía a la firma Alem Motors, vehículo que, según el fiscal, “no estaba en condiciones de rodar, no tenía seguro ni patente”.

Luego puso el acento en la velocidad que traía López cuando embistió a Milla y en la poca habilidad conductiva que tuvo para evitar el siniestro. “No existe frenado, no hubo maniobras; como venía cruzó la arteria y la chocó”, expuso.

Y agregó:“Al señor López no le interesó Milla; quiso aminorar las consecuencias de lo que había pasado, escondió el auto en el depósito donde vivía, el shock que dijo tener fue una excusa exculpatoria; nos quiere hacer creer que estaba arrepentido”.

“Mi vida también se arruinó ese día”

En la parte final del juicio, López usó su derecho a brindar la última palabra, momento que utilizó para pedirles perdón a familiares y amigos de Milla.

“No soy una persona inhumana, ni una persona que desprecie la vida de nadie, mucho menos la de una criatura que podría ser mi hija. Mi vida también se arruinó ese día, quedó destruida”, completó el imputado.