Decenas de fieles se congregaron en la capilla San José Obrero en honor al patrono universal del trabajo. Hubo procesión por las calles. Presidió la misa el obispo Jofré
Un buen número de fieles participaron ayer de la misa en honor al patrono universal del trabajo y los trabajadores, San José Obrero.
En ese marco fue que se llevó a cabo, en horas de la mañana, una ceremonia religiosa en la capilla que lleva el mismo nombre del santo, situada sobre calle Mendoza, en barrio General Paz.
La celebración fue presidida por el obispo de la Diócesis de Villa María, monseñor Samuel Jofré Giraudo, y el sacerdote Pedro Luchesse.
Durante la misa, vecinos y vecinas pidieron “por todos los trabajadores, para que valoricen su trabajo”, al tiempo que elevaron una plegaria “por los desocupados, para que no les falte la protección”.
En la oración, que fue recitada por toda la comunidad cristiana, también se pidió “por los jubilados, que dieron gran parte de su vida para que reciban una justa recompensa”.
Luego de la ceremonia, que duró aproximadamente una hora, hombres, mujeres y niños, junto con los referentes de la Iglesia católica, realizaron la tradicional procesión, que estuvo encabezada por la imagen de San José Obrero.
Fue así que los fieles, en medio de rezos y cantos, realizaron una caminata por las calles adyacentes del templo, donde tuvo su cierre la ceremonia.
Tras la misa, se realizó una procesión por las calles. Hubo rezos y cantos y un mismo pedido: que no falte el trabajo.
