Heraldo Pereno dijo lo que todos temen, pero nadie quiere expresar públicamente. “Aunque suene duro, si esta situación de pandemia se extiende y se dilata la continuidad de la cuarentena o el fútbol no vuelve hasta la primavera, puede ser un año perdido”.
Amplió al señalar que “en Argentina tenemos otro problema que se le suma a la pandemia, que es el invierno. El frío de julio y agosto es el peor momento para enfermarse. No quiero ni pensar si pasa mayo y junio... En el mejor de los casos nos prepararíamos en pleno invierno para ir a jugar un torneo muy raro, porque nadie puede explicar cómo va a volver el fútbol”.
Resaltó que “miro todo lo que puedo en materia de fútbol por internet, o por televisión o radio. Leo todos los diarios y ningún dirigente de Fifa o AFA explica cómo se va a jugar al fútbol una vez que vuelva, con qué recaudos. Todos creen que va a volver sin público, pero en la Liga villamariense no se puede jugar sin público”.
“La única alegría”
Pereno es hincha confeso de Boca Juniors e incluso fue artífice del festejo del 83° aniversario de San Lorenzo de Las Perdices con la presencia de las glorias del Xeneize. No pudo dejar de soltar al fanático que lleva adentro y señaló que “fue mi única alegría este año. Estuve en La Bombonera y ganarle ese campeonato en la última fecha a River Plate no tuvo precio”.
“Fue mi única felicidad y no me la quita nadie. Lloraba y me abrazaba con mi amigo y todos los que estaban cerca. Hoy me pregunto cómo van a hacer para jugar sin público, si eso es lo más lindo que tiene el fútbol. ¿Cómo van a prohibir los abrazos y la distancia de la gente en una cancha?”, insistió.
“Esos momentos compartidos son el fútbol. Ahora ya no sé que mirar: Netflix, Youtube... y la pandemia y cuarentena continúan”.
Redoblar el esfuerzo realizado
Estimó que “cuando digo que hay que arrancar dos veces desde cero, me refiero a que el esfuerzo será doble al realizado cuando haya que volver a rearmar el plantel”.
“Nosotros hicimos un esfuerzo muy grande en el inicio del año. En el pueblo tenemos buen nivel de jugadores, pero falta plata para los refuerzos. El año pasado necesitábamos reforzar y con Cristian (Agosto) coincidíamos en que hay buen material, pero era un plantel corto. No había recambio”, dijo.
Mencionó que “Cristian (Agosto) le cambió la mentalidad al plantel. Conozco su forma de pensar y de sentir el fútbol y le otorgué total libertad para que armara y desarmara. Llegamos a la final”.
“La suerte siempre acompaña al campeón y también al finalista. Clasificar fue muy difícil, le ganamos bien en Plaza Ocampo a Universitario, que era el campeón, y en nuestra cancha nos hicimos fuertes y dejamos en el camino a Yrigoyen en un partido duro en Tío Pujio. A la final la perdimos bien, porque pudimos ganar o perder en casa, pero con Ayrton Páez no se puede, y Ticino tiene a Páez. Nos ganó muy bien, sin objeciones”.
Resaltó que “para mantener la expectativa o aumentarla, había que mantener el equipo y reforzarlo bien. Lo hicimos”.
“Volvieron Matías y Jonatan Silva, incorporamos a Rosales y Galíndez, más tres pibes de General Deheza le garantizan protagonismo al equipo. Los chicos quieren entrenar mañana, jugadores tenemos, pero no se puede jugar”, dijo.
Señaló que “tenemos un gran plantel hoy. Pero no sé cuando vuelva el fútbol, no sé. Tenemos jugadores que vence su préstamo el 30 de junio. No se sabe cuándo arrancará el torneo. El fútbol no va a desaparecer, pero los jugadores y la Liga tendrán que ser muy considerados y contemplativos porque de lo contrario el año se perderá”.