El gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, ratificó que la provincia continuará con sus fronteras cerradas, pero con circulación de camiones de carga en el corredor Bioceánico que integra, y dijo que el presidente Alberto Fernández “quedó muy conforme y dijo que estamos trabajando muy bien” durante la reunión por videoconferencia de la que participaron ayer los mandatarios provinciales.
En el reporte diario por el coronavirus que brindó anoche, el mandatario aseguró que las autoridades nacionales y los demás gobernadores “compartieron el criterio de prudencia que tiene la gestión puntana a la hora de adoptar nuevas medidas de flexibilización” y aclaró: “dejé bien aclarado y bien explicado cómo hacemos para que puedan circular los camiones de carga y descarga y, sobre todo, la llegada a Chile”.
Rodríguez Saá aclaró también que “nuestro agro está plenamente trabajando”, al igual que las fábricas de Arcor y Bagley y anunció que en algunas zonas “vamos a ir habilitando, siempre con miedo, algunas actividades” pero que, de aparecer casos de Covid-19, “vamos a retroceder y volver al control más estricto”.
La provincia registró desde el inició de la cuarentena 10 casos positivos, más uno que fue tratado en Río Cuarto, proveniente de Villa Mercedes, de los cuales ocho han recibido el alta médica, sin que se registre circulación comunitaria en la provincia, ya que todos los casos fueron detectados en personas provenientes del exterior y en ninguno hubo contagio de contacto estrecho, según las autoridades sanitarias de la provincia.
El escenario permitió el aplanamiento de la curva de contagios en la provincia, que continuará con estrictas medidas de circulación, en las zonas denominadas 'rojas', mientras que para las zonas 'naranjas' y 'amarillas' se habilitó con sus respectivos protocolos “la actividad del campo y el sector industrial y el funcionamiento de las empresas alimentarias y el resto de los rubros”, explicó el Gobernador.