La Colonia de Vacaciones Inclusiva que organiza el Municipio de Alcira Gigena arrancó la temporada de verano con una excelente convocatoria ya que el número de inscriptos superó ampliamente al de 2018. Con 260 chicos alcanzaron un nuevo récord de asistentes. Las actividades son gratuitas para niños de entre 5 y 12 años. Los pequeños realizan propuestas lúdicas, deportivas y también educativas, con charlas para afrontar problemáticas sociales como, por ejemplo, el bullying.
“Por suerte año a año batimos récord. Y esto de superar la cantidad de inscriptos para nosotros como profesores es un orgullo, porque nos demuestra que estamos haciendo bien las cosas; que los papás confíen en nosotros es muy satisfactorio”, señaló Yamila Degiorgi, coordinadora de la escuela de verano.
Las actividades son de lunes a viernes de 9 a 12 horas. Cada semana se realizan rotativamente entre el club Lutgardis Riveros y el club Lautaro Roncedo.
“En la primera hora se les enseña a los chicos distintos deportes, como handbol, sóftbol, vóley y fútbol. Los grupos se dividen por edades. Uno es de 5, 6 y 7 años; de 8,9 y 10; y después de 11 y 12 años”, explicitó la profesora.
“A partir de las 10, los chicos meriendan y desde las 10.30 horas se hace pileta, con una hora de natación. Allí se les enseña a los niños las distintas técnicas de acuerdo a lo que ellos saben y al nivel de cada grupo. Después, de 11.30 hasta el cierre, los chicos disfrutan de pileta libre”, agregó.
Integración
Degiorgi rescató que la colonia de vacaciones apunta totalmente a la integración, tanto en los niños como en el staff de docentes. “Al ser inclusiva tenemos entre nuestros asistentes chicos con alguna discapacidad. Además somos un plantel de 15 profesores y contamos con dos profesores que tienen una discapacidad, que son voluntarios. Así que es inclusiva tanto por parte de los chicos como de los profesores”, recalcó.
La escuela de verano comenzó a funcionar desde el 1º de enero y finalizará el próximo 1º de febrero con un evento especial.
“La última semana como cierre de las actividades se realiza el campamento. Está programado para el miércoles 30 de enero. Empezaría a las 9 de la mañana y pasamos todo el día en el club Lutgardis. Los chicos armarán su carpa e incluso se aprovecha para enseñarles todo lo referente a acampar. A la tarde hacemos actividades lúdicas”, explicó la coordinadora.
Así por la noche se realizará “una cena de cierre con las familias en el salón del club Roncedo. Allí los chicos bailarán alguna canción y se entregarán recordatorios. Luego los papás se retiran y los chicos quedan acampando en el predio, y culmina el día jueves al mediodía”, concluyó.
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Las actividades son de lunes a viernes de 9 a 12 horas. Cada semana se realizan rotativamente entre el club Lutgardis Riveros y el club Lautaro Roncedo.
“En la primera hora se les enseña a los chicos distintos deportes, como handbol, sóftbol, vóley y fútbol. Los grupos se dividen por edades. Uno es de 5, 6 y 7 años; de 8,9 y 10; y después de 11 y 12 años”, explicitó la profesora.
“A partir de las 10, los chicos meriendan y desde las 10.30 horas se hace pileta, con una hora de natación. Allí se les enseña a los niños las distintas técnicas de acuerdo a lo que ellos saben y al nivel de cada grupo. Después, de 11.30 hasta el cierre, los chicos disfrutan de pileta libre”, agregó.
Integración
Degiorgi rescató que la colonia de vacaciones apunta totalmente a la integración, tanto en los niños como en el staff de docentes. “Al ser inclusiva tenemos entre nuestros asistentes chicos con alguna discapacidad. Además somos un plantel de 15 profesores y contamos con dos profesores que tienen una discapacidad, que son voluntarios. Así que es inclusiva tanto por parte de los chicos como de los profesores”, recalcó.
La escuela de verano comenzó a funcionar desde el 1º de enero y finalizará el próximo 1º de febrero con un evento especial.
“La última semana como cierre de las actividades se realiza el campamento. Está programado para el miércoles 30 de enero. Empezaría a las 9 de la mañana y pasamos todo el día en el club Lutgardis. Los chicos armarán su carpa e incluso se aprovecha para enseñarles todo lo referente a acampar. A la tarde hacemos actividades lúdicas”, explicó la coordinadora.
Así por la noche se realizará “una cena de cierre con las familias en el salón del club Roncedo. Allí los chicos bailarán alguna canción y se entregarán recordatorios. Luego los papás se retiran y los chicos quedan acampando en el predio, y culmina el día jueves al mediodía”, concluyó.