El comercio pide una nueva categorización y eliminar la esencialidad o no planteada desde el gobierno nacional, insistiendo en que los focos de contagios no se dan en los locales y, por ende, no termina siendo responsable el sector de la realidad sanitaria que golpea hoy al país. “El comercio no contagia, la operación minorista no es un foco de contagio masivo”, ratificó el villamariense Ezequiel Cerezo, titular de Fedecom, ante la consulta de este medio.
Además, plantea que los aportes que el Estado efectúa a comerciantes para mantener los salarios al día “son insuficientes” en cuanto al alcance por las exigencias del programa, y ratificó que el reclamo del sector no pasa por ser “anticuarentena, todo lo contrario. Lo que decimos es que no somos responsables de que la cuestión sanitaria haya llegado a esta situación. Sí queremos colaborar, entonces podemos dar una visión diferente con una clasificación, no por productos, sino por el riesgo sanitario que conlleve la operación”.
Sobre el cierre impuesto para locales no esenciales, Cerezo mencionó que el comercio efectuó inversiones “para estar a la altura de la circunstancia sanitaria y cumplir con los protocolos. Entonces, es difícil que la operación genere un foco de contagio”, y se diferenció de superficies amplias, con “concentración masiva de gente”.
En algunas localidades de la región se da la particularidad de que aún, sin ser esenciales, muchos comerciantes deciden abrir sus puertas. Al respecto, entendió que la situación se da más en el interior “porque el comerciante, con las normas higiénicas necesarias, entendemos que no es un lugar de contagio”.
Además, planteó que luego de transcurrido más de un año de pandemia no es válida la clasificación entre esenciales y no: “La clasificación debe ser por riesgo sanitario, por eso entendemos que el comercio minorista no puede continuar de esta manera”, sentenció.
A su criterio, la categorización pudo haber sido válida “en el inicio de una emergencia, pero no hoy. La clasificación desde el punto de vista sanitario debe ser por riesgo sanitario, y no por los productos que vendan. No puede ser que no se pueda comprar una remera en un local minorista, y sí en un hipermercado, cuál es el criterio”.
“Debemos desechar la clasificación y elaborar una nueva”, precisó.
Especialistas insisten en que 9 días de restricciones son insuficientes por la gravedad de la situación, considerando que deberían ser al menos 14 las jornadas sin movilización de gente. Si bien Cerezo entendió que es “insostenible” desde el punto de vista comercial, coincidió en que “seguramente es insuficiente desde el punto de vista sanitario. Por eso decimos que se debe tomar la medida adecuada para proteger la salud. Ante ello, consideramos que el comercio minorista no debe ser alcanzado por estas restricciones”.
Y fue más allá al plantear que la mayor preocupación del sector “es la improvisación y falta de previsión. Las camas no se ocupan de un día para el otro y, por el contrario, deberíamos haber tenido reuniones con autoridades con anticipación para poder prepararnos para una nueva restricción”. Si en los encuentros “nos dicen que en 15 días se completarían las camas o que se va a llegar a una situación extrema, podemos analizar cómo solucionamos” el impacto en el sector.
“Quien determina una medida no siendo el destinatario de ella, muy difícilmente le acierte porque no conoce la realidad”, interpretó. Graficó que al plantear que el comercio no esencial puede efectuar operaciones, “qué sucede con los empleados, porque van a trabajar pero si la policía los para es de un comercio no esencial”.
Aportes insuficientes
“Estamos escuchando que los distintos gobiernos van a ayudar, pero cuando ese ayuda es tardía, no sirve, no es una solución”, destacó.
Sobre los aportes que impulsa Nación a empresas, principalmente para el pago de salarios, mencionó que “están vigente, aunque a nuestro criterio son insuficientes en cuanto al alcance. Exigen alguna cuestión formal muy compleja de aplicar, entre ellas el nivel de facturación se debe contrastar con 2019. Con 90% de inflación piden que facturés menos que ese año, cuando en realidad es muy difícil que pase eso”.
Dijo que la asistencia es insuficiente y aclaró que también “se están elaborando algunas ayudas provinciales y municipales para el comercio; esperemos que sean anunciadas a la brevedad”.