“Los chicos hicieron un torneo increíble. No siempre se puede ganar, pero es importante saber aceptar las derrotas. Estoy orgulloso de ellos por la actitud que mostraron”, expresó Placente en conferencia de prensa tras el encuentro.
El DT valoró especialmente la unidad y el compromiso del plantel, formado en poco tiempo, que logró llegar hasta la instancia decisiva del certamen: “Volvieron a dejar a Argentina en una final mundial juvenil. Se armó un gran grupo y fuimos una familia durante todo el mes. Son futbolistas con un futuro enorme”.
Placente también destacó el vínculo que se generó fuera de la cancha: “Lo que más se disfrutó fue la convivencia. Hicimos cosas para unirnos, disfrutar y pasarla bien. Esta camada se va a extrañar, porque uno siente orgullo al ver cómo crecieron desde que eran chicos”.
Sobre el desarrollo del partido, el técnico analizó: “Nos costó al principio, tal vez por los nervios. Un error temprano nos dejó en desventaja, y Marruecos es un rival fuerte física y técnicamente. Cuando logramos asentarnos, ya íbamos 2-0 abajo”.
A pesar del resultado, Placente se mostró conforme con la actuación general: “Competir hasta el último día ya es muy importante. Este equipo estuvo a la altura. Marruecos fue un justo campeón, pero nosotros también demostramos carácter, talento y compromiso”.
La Selección argentina Sub-20 cerró así un torneo sobresaliente, en el que reafirmó el potencial de una nueva generación de jugadores que apunta a nutrir el futuro del fútbol nacional.