La docente Carina Almada, quien se desempeña como profesora en siete instituciones educativas de Villa María y la región, se acercó a esta redacción para dar a conocer su caso. Según relató, en el Centro Cívico no le han explicado por qué en la plataforma Ciudadano Digital (CiDi) figura como “no apta” para desempeñar su trabajo, situación que le genera incertidumbre y preocupación.
La mujer contó que llegó a Villa María en marzo del presente año y que rápidamente consiguió trabajo en escuelas de la región. “Soy profesora de Geografía. Sumé horas en siete colegios de Villa María y Arroyo Algodón”.
Y siguió: “Una de las condiciones para trabajar es el apto psicofísico. Visité a varios profesionales de la salud. Fui a dos instituciones públicas, a la Asistencia y al Hospital, y me brindaron todos los certificados, incluido el psicológico, donde dice que estoy apta para trabajar”.
“Presenté todos los informes en el Centro Cívico. Aparentemente estaba todo bien. Allí me atendió una doctora. Me dijeron que tenía que esperar 72 horas para obtener el resultado. Después de eso, yo me aboqué a mis alumnos, a planificar, a hacer bien mi trabajo”, sostuvo.
“Después de un mes fui a preguntar por qué se estaba demorando el apto. La secretaria del box 1 me dijo que la doctora había visto algo raro y que me tenían que mandar a hacer un examen psicológico a Córdoba”, contó Almada.
Y amplió: “Me dijeron que esperara, que me iban a llamar de Córdoba, pero pasó el tiempo y no me llamaron. Un día me presenté ante la doctora para consultar por qué me derivaban a Córdoba. Fue allí cuando me dieron un turno para el 13 de julio, en pleno receso de invierno. Viajé y llevé dos certificados, uno que me lo otorgó la directora de la Asistencia Pública y otro que me lo entregó una psicóloga del Hospital. Hasta ahora no tuve ninguna respuesta. Hoy me encuentro con que en el CiDi aparece un certificado que dice que en la parte mental no estoy apta”.
“Yo vengo dando clases desde comienzo de año y no he tenido ningún inconveniente con ninguna persona, ningún problema, incluso, me pidieron un papel de desempeño laboral que fue presentado debidamente a la doctora que me atendió en Córdoba”, acentuó la docente.
Y sostuvo: “No entiendo por qué dicen que no estoy apta. Me da miedo esta situación. No puedo quedarme sin trabajo”.
Almada contó que días atrás, con el acompañamiento de delegados locales de la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC), presentó un recurso de reconsideración que incluye informes de hasta siete profesionales de la salud. Según precisó, todos coinciden en que ella se encuentra en perfecto estado para realizar con normalidad su trabajo en las aulas.
En declaraciones a este medio, la educadora exigió que las autoridades que tratan su caso le acerquen con celeridad una respuesta.