Como si el fútbol necesitara explicar que siempre otorga revancha, el subcampeón eliminó al campeón con el tiro del final, en una jugada aislada cuando parecía que el 0-0 era irremediable, igual que en la final del año pasado.
Con la misma fórmula, porque esta vez Argentino no tuvo a su “10” (Claudio Díaz) para rebelarse ante el empate como aquella vez, pero en cambio Atlético Ticino sí tuvo a su “10” (Ayrton Páez) para sacar de la galera un pase - gol cuando el partido moría para que Rodrigo Fassi atropelle y a los tumbos logre sacar un remate que se perdió entre las piernas de un defensor rival e ingresó dejando fuera de acción a Leonel Luciani.
Parecido al gol del campeonato de Gonzalo Larghi en la misma cancha, aunque en distintos arcos y espacios. Aquella vez el gestor fue Díaz, ahora fue Páez, y el festejo de Fassi y de Atlético Ticino, que celebró en un final electrizante en el estadio del “lobo”.
Hasta podría decirse que Atlético Ticino lo ganó porque lo buscó más al triunfo (era el único resultado que le servía para seguir en carrera), y lo logró cuando el rival creyó tener “todo bajo control”.
Otra de las grandes mentiras del fútbol quedó desmitificada una vez más, porque un partido está bajo control recién cuando se terminó, o quizás cuando se marcó una diferencia grande en goles y se está terminando.
Con el 0-0 que dolía tanto como el frío del invierno que se apoderaba de la tarde en barrio Nicolás Avellaneda, donde el sol se escapaba pidiendo clemencia al fuerte viento, el gol de Fassi pareció de otro partido, pero para dejar en claro que siempre hay revancha.
Argentino saboreaba la clasificación, el empate era un triunfo. La crónica comenzaba encontrar a las figuras en la sapiencia de Giménez, la solvencia de Molina y las manos mágicas del “Cumbia” Luciani. Pero el rey Ayrton Páez volvió.
El “Pulpo” Ñañez tenía todo el mapa del partido en su cabeza, y el tesoro estaba bien protegido. Es más, la zurda indescifrable de “Tinti” Ñañez junto a la derecha de “Nano” Ñañez se encargaban de calentar más al desesperado intento de Atlético Ticino, que nunca claudicó en la búsqueda de 1 gol.
Juan Bianchi lo había dejado todo en cada cambio, en cada grito de aliento para que Atlético Ticino lo fuera a buscar de principio a fin como lo requería para llegar a cuartos, pero la caprichosa no había querido entrar.
Ni en aquel tiro de esquina de Tobías Ñañez, que Rodrigue el elevó en el inicio del partido para que el “lobo” le hiciera saber que no le regalaría el protagonismo (5’); ni tampoco con el tiro de esquina de Páez, que cabeceó su compadre Gonzalo Bertola, y cuando parecía adentro, desde el piso Luciani la sacó ¿en la línea o adentro? (10’).
El 0-0 pasó a ser un resultado dulce para Argentino, que entendió que el viento no lo favorecía, pero el empate lo clasificaba. Se acomodó 4-3-1-2 para no dejar que una visita más decidida a atacar, no le complicara la fiesta.
Atlético Ticino tuvo que hacerse cargo, jugar con 3 en el fondo y superpoblar de volantes el campo para poder limpiársela a Páez y Lucas Favalli. Lo intentó con Brugnaro y Maldonado por las bandas, y con el ingenio y la pegada de Bertola acompañado por Romero por adentro. No le alcanzó.
Martín Favalli limpiaba la salida, pero los Ñañez acompañaba al “Pulpo”, y Giménez pensaba y resolvía bien, para destruir avances del rival, y para construir alguna contra que no terminaron sentenciando Funes o “Coqui” Candiotto, quien sufrió una severa lesión que dejó a Argentino sin su figura más desequilibrante.
Morello entendió que soltar la velocidad de Aramburu al mediocampo, y quitarle el peso de marcar a Páez, podía ser el escape a la victoria. Ya allí depositó sus sueños el “lobo”.
Atlético Ticino lo buscó en bloque, sin renunciar a atacar para lograr la diferencia que hubo en el juego a su favor cuando la pelota pasó por Páez, quien con dos desbordes desarticuló una defensa bien parada del local, y la visita casi festeja por Páez (Luciani lo impidió) y por Maldonado, quien no podía creer como Luciani y el poste le negaron la apertura (32’).
Furioso lo buscó Ticino, incluso a Maldonado le pudo costar caro un codazo contra Rodríguez, que el juez sancionó sólo con amarilla, cuando la etapa se iba, y ni el tiro del final le salió a Romero (elevó).
Atlético Ticino sólo sufrió con un tiro de esquina de Giménez, que salvó Fantino, y el arquero volvió a ser clave cuando le tapó el gol a Funes, quien recibió una perfecta asistencia de Tobías Ñañez, pero definió suave a las manos del “1”.
Iban 21’, y todo el esfuerzo para ganar era de la visita, que sólo había encontrado a Páez con un tiro de esquina de Bertola, que el “10” desvió en el área chica (7’).
Juan Bianchi sabía que debía arriesgar, pero empezó por evitar la expulsión de Acosta, que pudo irse a las duchas por faltas a Giménez y Rodríguez (lo suplantó Freytes). Al ver que Argentino ya no lo hería con la velocidad de sus puntas, fue por más con Vera y Sotto.
Tampoco le alcanzó, porque Vera desvió su chance cuando Molina parecía un frontón que despejaba todo, y le regaló su oportunidad.
Páez lucía enojado con el mundo, le recriminaba cada fallo al juez y a sus asistentes, como si sus piernas no le respondieran en su regreso tras un desgarro para ganar el partido. Entonces Matías Bianchi y Fassi saltaron al campo para quemar las nabes en la visita.
Giménez y Franco Ñañez manejaban los tiempos, pero Aramburu tuvo el gol en un pase rápido de Tobías Ñañez, pero en el área definió a las manos de Fantino. Morello no apeló al banco, como ahorrando energía para un final electrizante.
Se iluminó Páez, e inventó un pase gol para Rodrigo Fassi, y aunque Argentino pidió offside (luego se lo hicieron saber de la peor manera al árbitro Emiliano Martino), el sabio delantero escapó en velocidad. Molina llegó al cierre, pero la pelota le rebotó a favor a Fassi, que definió entre las piernas de Ledesma, y se le metió contra el palo derecho a Luciani a los 47’ (1-0).
La venganza fue terrible. Atlético Ticino le “sacó” del corazón de campeón la corona a Argentino. El torneo Apertura tendrá nuevo rey, y “entre algodones” Ayrton Páez le hizo un guiño de ojo para atreverse a reconquistarla. El rey a vuelto.
Arbitró Emiliano Martino, y Argentino formó con Leonel Luciani; Benjamín Aramburu, Thiago Ledesma, Gastón Molina y Valentín Rodríguez; Isaías Ñañez, Franco Ñañez, Lucas Giménez y Tobías Ñañez; Franco Funes e Isaias Candiotto. En el primer tiempo ingresó 35’ Braian Cufré por Candiotto. ST 55’ Facundo González por Ledesma. DT Ernesto Morello.
Atlético Ticino alistó a Diego Fantino; Elías Acosta, Octavio Becchero, Lautaro Monje y Nicolás Brugnaro; Juan Maldonado, Gonzalo Bertola, Martín Favalli, Francisco Romero y Nicolás Brugnaro; Lucas Favalli y Ayrton Páez. En el segundo tiempo ingresaron 11’ Leandro Freytes por Acosta; 23’ Agustín Vera y Braian Sotto por Maldonado y Lucas Favalli; y 38’ Matías Bianchi y Rodrigo Fassi por Nicolás Brugnaro y Francisco Romero. DT Juan Bianchi.
En Reserva, Argentino clasificó a cuartos al vencer 1-0 a Atlético Ticino con gol de Agustín Ramos.