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La faena de bovinos creció más del 10 por ciento

En enero alcanzó a 1,15 millones de cabezas, según un informe del Consorcio de Exportadores de Carne Argentina. Además el consumo llegó a 61 kg/habitante por año y crecieron las exportaciones

La faena de bovinos creció en enero 10,15 por ciento con respecto al mismo mes del año pasado al alcanzar 1,15 millones de cabezas, al mismo tiempo que se incrementó con respecto a diciembre de 2016 un 5%, informaron desde el Consorcio de Exportadores de Carnes Argentina (ABC).

Asimismo se produjo una suba en el consumo anual por habitante y también un crecimiento de las exportaciones.

El aumento en los animales sacrificados con respecto al mes anterior se debió a la mayor cantidad de días hábiles que hubo en enero, explicaron desde la cámara empresaria.

“Al considerar el promedio diario de animales sacrificados se observa que fue similar a los verificados en los meses de octubre y noviembre de 2017, que fueron los segundos más elevados del año pasado y entre los más altos desde 2013”, detalló el presidente de ABC, Mario Ravettino.

“El nivel alcanzado en el primer mes de 2018 supera en un 10% al de doce meses atrás, es un 5% superior al promedio verificado entre 2007/17, pero está un 5% por debajo del correspondiente a 2005/10”, expresó Ravettino.

De esta manera, las 1,15 millones de cabezas faenadas en enero se posicionaron por encima de las 1,09 millones de diciembre y a las 1,04 millones del mismo mes de 2017.

En base a esto, la producción de carnes bovinas en el primer mes de 2018 fue equivalente a 255 mil toneladas peso res, la cual "fue una de mayores de los últimos años, lo que es congruente con el aumento en el número de vacunos faenados, mientras que el acumulado de doce meses se mantuvo por encima de los 2.8 millones de toneladas peso res.

Por último, la abundante oferta de carnes bovinas permitió un crecimiento del consumo local.

“Durante el primer mes del 2018 y estimando un volumen de exportaciones parecido al que se ha venido registrando, se llega a un equivalente de 61 kg/habitante por año, que está por encima del promedio alcanzado el año pasado (58 kg por habitante año). Cabe recalcar que ello se ha dado en un marco en el que paralelamente crecieron las exportaciones”, concluyó Ravettino.

 

Un nuevo mercado

 

En otro orden, el Gobierno celebró la noticia de que Singapur volvió a autorizar la importación de alimentos argentinos con la certificación Halal, un proceso de garantía de calidad acorde con las exigencias alimentarias y religiosas de la religión musulmana.

La embajada argentina en Singapur, reabierta recientemente, comunicó que el Consejo Religioso Islámico de Singapur (MUIS), encargado de las certificaciones, aceptó una propuesta que el Gobierno presentó en agosto pasado.

Desde mediados de 2016, Singapur no reconocía a ninguna certificadora argentina de Halal, por lo que a partir de esta medida el potencial de crecimiento que tienen los productos agroalimentarios es muy importante, especialmente en lo que se refiere a carnes, interpretó la Cancillería.

Desde ahora, el Senasa expedirá dos nuevos cuestionarios técnicos requeridos por el MUIS para cada establecimiento exportador, con el consentimiento del Ministerio de Agroindustria y del Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA).

El canciller Jorge Faurie celebró "la posibilidad de aumentar la llegada de productos argentinos de origen agroindustrial a Singapur", y recordó que "en los últimos dos años, el vínculo bilateral ha recibido un fuerte impulso a partir de los encuentros al más alto nivel".

Para Faurie, Singapur "es una de las economías más desarrolladas y pujantes de Asia, y abre enormes perspectivas y oportunidades para la inserción en ese continente".

El ministro de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere, también destacó que la noticia "consolida el objetivo de convertirnos en supermercado del mundo, lo cual se traduce en más divisas, más empleo y más crecimiento".