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Incendios en el Corredor del Caldén: las pérdidas ambientales son incalculables

Ayer por la mañana se había reiniciado un foco en estancia La Laura, en zona de Villa Huidobro. Si bien se logró extinguir el fuego, la superficie del área protegida que resultó afectada por los siniestros alcanza las 1.500 hectáreas

Los incendios en el sector del Corredor del Caldén dejaron un panorama desolador en el sur-sur provincial y las pérdidas ambientales son incalculables. Ayer fue otra jornada de trabajo arduo para los bomberos de Villa Huidobro, ya que se reinició un foco en proximidades de la estancia La Laura. Si bien se logró extinguir el fuego en la zona, la superficie afectada en el área protegida durante los siniestros de esta semana supera las 1.500 hectáreas.

Los fuertes vientos, superiores a 60 kilómetros por hora en las últimas jornadas, provocaron serios inconvenientes a los brigadistas de diversos cuarteles que se plegaron a tratar de controlar las llamas, en un lugar que ardía sin control por el agravante de la fuerte sequía.

Si bien se habló de un problema en una línea eléctrica como causante de los siniestros, aún no está claro el origen de las llamas en establecimientos rurales que están separados por varios kilómetros. La Fiscalía con asiento en Huinca inició actuaciones con peritajes de Bomberos de Córdoba para determinar el origen.

Bomberos de siete localidades de la Regional 3 y Policía Departamental Roca trabajaron denodadamente por más de 20 horas para controlar los incendios, además vecinos del sector colaboraron para detener el fuego.

Daños

Según las imágenes satelitales, los principales focos se ubicaron unos 25 kilómetros al oeste de Villa Huidobro en estancia La Loma, La Laura, El Sueldo y La Martita; y otros incendios, unos 20 kilómetros al norte de esta misma localidad (Los Pinos). Toda esta región está dentro del Área Protegida del Corredor del Caldén.

En estancia La Loma se quemaron rastrojos y bosque nativo en aproximadamente 500 hectáreas; en estancia Los Pinos alrededor de 200 hectáreas resultaron quemadas, mayormente rastrojo; en estancia La Laura, unas 200 hectáreas fueron afectadas mayormente de rastrojo; en estancia El Sueldo más de 150 hectáreas afectadas de rastrojo y monte nativo; en estancia La Martita hubo unas 50 hectáreas afectadas; y en estancia Wilber alrededor de 400 hectáreas fueron afectadas, mayormente rastrojo, además hubo pérdidas de alambrados, bolsones de cereal y animales.

Desde la organización ambientalista Mamull Mapu con sede en Villa Huidobro se lamentó el hecho y su referente, Mario Campos, aseguró: “Ya lo veíamos venir, desgraciadamente ocurrió, las condiciones estaban dadas, muchas veces estuvieron dadas pero hasta ahora no había sucedido así”. “Qué pasa con el daño ambiental, caldenes centenarios, un ecosistema que desaparece en 2 horas porque no se tomaron prevenciones del caso, son pérdidas irreparables. Si hubiera picadas cortafuegos como corresponde, si hubiera mecanismos de prevención en un área protegida, esto no hubiese ocurrido en esta dimensión, en un fuego que avanzó 15 kilómetros en poco tiempo”, dijo.

Ignacio Castro. Redacción Puntal