El arzobispo de La Plata, monseñor Víctor Manuel Fernández, más conocido como el padre “Tucho”, fue designado por el papa Francisco nuevo prefecto del Dicasterio de la Doctrina de la Fe.
Lo confirmó ayer a Puntal el propio “Tucho”, de 60 años, nacido en Gigena y de una vasta trayectoria pastoral en Río Cuarto: “La finalidad principal es velar por la integridad de la Doctrina de la Fe. Pero Francisco me mandó una carta memorable donde dice que eso no se logra controlando o persiguiendo, sino promoviendo la reflexión, la profundización de la fe y la libertad de las distintas líneas de pensamiento dentro de la Iglesia. También me pide que delegue el tema de los abusos en una sección muy especializada y me dedique más bien a esta finalidad académica en diálogo con el mundo”.
Es un ministerio clave en la Iglesia católica, aunque para algunos es el más importante.
De esta forma, “Tucho” reemplazará al cardenal jesuita español Luis Francisco Ladaria Ferrer, tras finalizar su mandato, dado que cumplió los 75 años.
Se trata del cargo de “guardián de la fe” que desempeñó Joseph Ratzinger, en el papado de Juan Pablo II, antes de ser Benedicto XVI.
La Doctrina de la Fe es “un dicasterio de la curia romana que tiene la misión de ayudar al Papa y a los obispos a proclamar el Evangelio en todo el mundo, promoviendo y tutelando la integridad de la doctrina católica sobre la fe y la moral, sobre la base del depósito de la fe y también buscando una comprensión cada vez más profunda de ésta ante nuevos interrogantes”.
Sin embargo, Francisco le pidió a “Tucho”, su teólogo de confianza, que “no se dedique al asunto de los abusos, ya que ahora hay una sección de especialistas para eso, sino, más bien, que fomente la reflexión sobre la fe en diálogo con los problemas del mundo y de las ciencias”.
La carta del Papa
A través de una carta, el Papa fijó los objetivos al nuevo prefecto:
“Querido hermano:como nuevo Prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe te encomiendo una tarea que considero muy valiosa. Tiene como finalidad central custodiar la enseñanza que brota de la fe para dar razón de nuestra esperanza, pero no como enemigos que señalan y condenan”.
“El Dicasterio que presidirás en otras épocas llegó a utilizar métodos inmorales. Fueron tiempos donde más que promover el saber teológico se perseguían posibles errores doctrinales. Lo que espero de vos es sin duda algo muy diferente”.
“Fuiste decano de la Facultad de Teología de Buenos Aires, presidente de la Sociedad Argentina de Teología y sos presidente de la Comisión de Fe y Cultura del Episcopado Argentino, en todos los casos votado por tus pares, quienes de ese modo han valorado tu carisma teológico. Como rector de la Pontificia Universidad Católica Argentina alentaste una sana integración del saber. Por otra parte, fuiste párroco de Santa Teresita y hasta ahora arzobispo de La Plata”.
“Dado que para las cuestiones disciplinarias -relacionadas en especial con los abusos de menores- recientemente se ha creado una sección específica con profesionales muy competentes, te pido que como prefecto dediques tu empeño personal de modo más directo a la finalidad principal del Dicasterio que es guardar la fe”.
“Para no limitar el significado de esta tarea, hay que agregar que se trata de aumentar la inteligencia y la transmisión de la fe al servicio de la evangelización, de modo que su luz sea criterio para comprender el significado de la existencia, frente a las preguntas que plantean el progreso de las ciencias y el desarrollo de la sociedad”.
“Es más, sabés que la Iglesia necesita crecer en su interpretación de la Palabra revelada y en su comprensión de la verdad sin que esto implique imponer un único modo de expresarla. Porque las distintas líneas de pensamiento filosófico, teológico y pastoral, si se dejan armonizar por el Espíritu en el respeto y el amor, también pueden hacer crecer a la Iglesia. Este crecimiento armonioso preservará la doctrina cristiana más eficazmente que cualquier control”.
“Es bueno que tu tarea exprese que la Iglesia alienta el carisma de los teólogos y su esfuerzo por la investigación teológica con tal que no se contenten con una teología de escritorio, con una lógica fría y dura que busca dominarlo todo”.
“Sabés bien que hay un orden armonioso entre las verdades de nuestro mensaje, donde el mayor peligro se produce cuando las cuestiones secundarias terminan ensombreciendo las centrales”.
“En el horizonte de esta riqueza tu tarea implica además un especial cuidado para verificar que los documentos del propio Dicasterio y de los demás tengan un adecuado sustento teológico”.
“La Virgen Santísima te proteja”.
Cómo lo vio “Tucho”
Por su parte, “Tucho” contó:“Estuve compartiendo una semana con Francisco. Lo encontré completamente recuperado. Tiene muy buen volumen de voz, camina varias veces, come muy bien, pero sobre todo trabaja el día entero, Más cantidad de horas que cualquiera en el Vaticano. Se ve que el Espíritu Santo todavía quiere hacer muchas cosas a través de él”.
El nuevo prefecto asumirá sus funciones en septiembre.