Las especialistas en medicina oncológica, Mónica Martínez y Liliana Bisio, elevaron un pedido a las mujeres y les sugirieron que tengan conciencia y se realicen consultas tempranas. Desde esa óptica, manifestaron que “un 90 por ciento de los diagnósticos tempranos tienen cura”.
La oncóloga clínica Bisio expresó: “Tenemos que generar conciencia de que es necesario realizar diagnósticos tempranos”. Y reiteró: “Tenemos que llegar a que todas las mujeres tengan un diagnóstico temprano”. En la misma sintonía, la especialista explicó que de ese modo pueden evitarse futuros tratamientos más invasivos como las quimioterapias. “Con una pequeña cirugía, o con un tratamiento en radioterapia esa paciente se cura y no tenemos que llegar a todas las demás instancias”, apuntó.
Por otro lado, la radioncóloga Martínez agregó que cuando la enfermedad se detecta en una fase avanzada, “no siempre es posible aplicar un tratamiento curativo”. En cuanto a los tratamientos, dijo: “Cada tipo de cáncer requiere un tratamiento específico. Entre ellos están las cirugías, la cirugía combinada con quimioterapia, la quimioterapia como tratamiento único, o la radioterapia en otros casos”.
Autoexamen
“Es importante el autoexamen”, remarcó Martínez. Y, en esta dirección señaló en qué consiste ese autoanálisis, que cada mujer se puede realizar para detectar anomalías. “El autoexamen se realiza a través de la palpación de la mama en sentido de las agujas del reloj”, contó. También aclaró que “no hay que quedarse sólo con ese autoexamen”, sino que es necesario “recurrir a los especialistas para lograr más precisión”.
La radioncóloga manifestó cuáles son las anomalías que pueden verse las mujeres. “La paciente puede notar la existencia de un nódulo, dolor o retracción del pezón, irritación o retracción de la piel, signos inflamatorios, descamación de la piel y pezón, secreción en periodos no lactantes, o nódulos debajo de las axilas correspondientes a ganglios”, enumeró.
Datos estadísticos
Las integrantes del Instituto Zunino, además, reflejaron que en las mujeres del país, el cáncer de mama ocupa el primer lugar con un amplio margen de pacientes. Luego se ubica el cáncer de cuello uterino, seguido por el de colon. Luego le siguen los de pulmón, ovarios, y riñones.
“Argentina se encuentra en el rango de países con incidencia en cáncer media-alta, de acuerdo a las estadísticas que realiza la Agencia Internacional del Cáncer”, destacó Martínez. Otros datos que ofrecieron las especialistas refieren a los tipos de cáncer y a las muertes que originan. “Hay más de 200 tipos de cáncer, y cada uno tiene características propias y tratamientos únicos. Existen 14 millones de nuevos casos de cáncer en el mundo, de los cuales, 8 millones de personas mueren al año por esta causa”, indicaron.
“Entre el 30 y el 60 por ciento de los cánceres se pueden evitar reduciendo los factores de riesgo, y aplicando estrategias preventivas con bases científicas”, especificó una de las médicas. Entre los objetivos centrales del instituto, se pueden destacar: la curación del cáncer y la mejora en la calidad de vida del enfermo o enferma. Este último punto se logra a través de los cuidados paliativos, y están dirigidos a aquellos pacientes que tienen tumores avanzados.
La radioncóloga manifestó que “un tercio de todas las muertes por cáncer se deben a 4 principales riesgos asociados a hábitos”. A partir de ello, listó: “El tabaquismo, la dieta y la obesidad, la actividad física y el consumo de alcohol”.
Mitos y miedos
Bisio contó que existe “una especie de mito” que dice que las mujeres grandes son las únicas que pueden tener cáncer de mama. En referencia a ello, aclaró: “Tenemos que sacarnos la idea de que el cáncer de mama es de las mujeres grandes, porque cada vez estamos teniendo pacientes más jóvenes”. En la misma dirección, añadió que “a medida que aumenta la edad, también aumenta la frecuencia”, pero ratificó que “eso no quiere decir que una chica de 20 años no pueda tener cáncer de mama”.
Por otro lado, la médica invitó a las mujeres a que “se saquen los miedos”, y se realicen estudios simples como la mamografía. Explicó que “si bien tiene algún porcentaje de radiaciones”, eso no justifica que alguien tenga un tumor y que ese mismo avance por no realizarse una mamografía. “Yo prefiero hacerme tres mamografías y asegurarme que no tengo nada, y no quedarme con la duda y después enterarme que tengo un cáncer avanzado difícil de curar”, afirmó.
También aseguró que en reiteradas oportunidades recibe a pacientes con grandes nódulos, esgrimiendo que no habían hecho consultas anteriormente porque no sentían dolor. “Quiero decirles a las mujeres que el cáncer de mama no duele”, dijo. Y añadió: “No hay que esperar que aparezcan cualquier tipo de factores extraños para consultar con los médicos”.
¿Qué se logra con los estudios?
La oncóloga clínica relató que con la realización de los estudios pertinentes se pueden determinar los estadios del cáncer, en el caso de que existan, y los tratamientos específicos para tratar con ellos. “La curación en el estadio 1, puede llegar al 90 por ciento, mientras que en el estadio 2, es decir, un nivel más avanzado, puede haber un 20 o 30 por ciento de recaída en los pacientes”, apuntó.
“Por lo general, se van mejorando cada vez más estas estadísticas y se van curando más pacientes. Para eso debemos insistir en el diagnóstico temprano”, mencionó. La mujer contó cuáles suelen ser los tamaños de los nódulos mamarios, según su estadio. A partir de ello explicó en la primera etapa, no suelen superar los dos centímetros. En el segundo, los tumores suelen tener entre dos y cinco centímetros y ya comienzan a perjudicar a los ganglios. A partir del tercer estadio los nódulos superan los cinco centímetros y, en la etapa siguiente, se puede hablar de células que viajan, a través de los vasos linfáticos, a todo el organismo radicándose en el cerebro, pulmones, hígado o huesos.
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Por otro lado, la radioncóloga Martínez agregó que cuando la enfermedad se detecta en una fase avanzada, “no siempre es posible aplicar un tratamiento curativo”. En cuanto a los tratamientos, dijo: “Cada tipo de cáncer requiere un tratamiento específico. Entre ellos están las cirugías, la cirugía combinada con quimioterapia, la quimioterapia como tratamiento único, o la radioterapia en otros casos”.
Autoexamen
“Es importante el autoexamen”, remarcó Martínez. Y, en esta dirección señaló en qué consiste ese autoanálisis, que cada mujer se puede realizar para detectar anomalías. “El autoexamen se realiza a través de la palpación de la mama en sentido de las agujas del reloj”, contó. También aclaró que “no hay que quedarse sólo con ese autoexamen”, sino que es necesario “recurrir a los especialistas para lograr más precisión”.
La radioncóloga manifestó cuáles son las anomalías que pueden verse las mujeres. “La paciente puede notar la existencia de un nódulo, dolor o retracción del pezón, irritación o retracción de la piel, signos inflamatorios, descamación de la piel y pezón, secreción en periodos no lactantes, o nódulos debajo de las axilas correspondientes a ganglios”, enumeró.
Datos estadísticos
Las integrantes del Instituto Zunino, además, reflejaron que en las mujeres del país, el cáncer de mama ocupa el primer lugar con un amplio margen de pacientes. Luego se ubica el cáncer de cuello uterino, seguido por el de colon. Luego le siguen los de pulmón, ovarios, y riñones.
“Argentina se encuentra en el rango de países con incidencia en cáncer media-alta, de acuerdo a las estadísticas que realiza la Agencia Internacional del Cáncer”, destacó Martínez. Otros datos que ofrecieron las especialistas refieren a los tipos de cáncer y a las muertes que originan. “Hay más de 200 tipos de cáncer, y cada uno tiene características propias y tratamientos únicos. Existen 14 millones de nuevos casos de cáncer en el mundo, de los cuales, 8 millones de personas mueren al año por esta causa”, indicaron.
“Entre el 30 y el 60 por ciento de los cánceres se pueden evitar reduciendo los factores de riesgo, y aplicando estrategias preventivas con bases científicas”, especificó una de las médicas. Entre los objetivos centrales del instituto, se pueden destacar: la curación del cáncer y la mejora en la calidad de vida del enfermo o enferma. Este último punto se logra a través de los cuidados paliativos, y están dirigidos a aquellos pacientes que tienen tumores avanzados.
La radioncóloga manifestó que “un tercio de todas las muertes por cáncer se deben a 4 principales riesgos asociados a hábitos”. A partir de ello, listó: “El tabaquismo, la dieta y la obesidad, la actividad física y el consumo de alcohol”.
Mitos y miedos
Bisio contó que existe “una especie de mito” que dice que las mujeres grandes son las únicas que pueden tener cáncer de mama. En referencia a ello, aclaró: “Tenemos que sacarnos la idea de que el cáncer de mama es de las mujeres grandes, porque cada vez estamos teniendo pacientes más jóvenes”. En la misma dirección, añadió que “a medida que aumenta la edad, también aumenta la frecuencia”, pero ratificó que “eso no quiere decir que una chica de 20 años no pueda tener cáncer de mama”.
Por otro lado, la médica invitó a las mujeres a que “se saquen los miedos”, y se realicen estudios simples como la mamografía. Explicó que “si bien tiene algún porcentaje de radiaciones”, eso no justifica que alguien tenga un tumor y que ese mismo avance por no realizarse una mamografía. “Yo prefiero hacerme tres mamografías y asegurarme que no tengo nada, y no quedarme con la duda y después enterarme que tengo un cáncer avanzado difícil de curar”, afirmó.
También aseguró que en reiteradas oportunidades recibe a pacientes con grandes nódulos, esgrimiendo que no habían hecho consultas anteriormente porque no sentían dolor. “Quiero decirles a las mujeres que el cáncer de mama no duele”, dijo. Y añadió: “No hay que esperar que aparezcan cualquier tipo de factores extraños para consultar con los médicos”.
¿Qué se logra con los estudios?
La oncóloga clínica relató que con la realización de los estudios pertinentes se pueden determinar los estadios del cáncer, en el caso de que existan, y los tratamientos específicos para tratar con ellos. “La curación en el estadio 1, puede llegar al 90 por ciento, mientras que en el estadio 2, es decir, un nivel más avanzado, puede haber un 20 o 30 por ciento de recaída en los pacientes”, apuntó.
“Por lo general, se van mejorando cada vez más estas estadísticas y se van curando más pacientes. Para eso debemos insistir en el diagnóstico temprano”, mencionó. La mujer contó cuáles suelen ser los tamaños de los nódulos mamarios, según su estadio. A partir de ello explicó en la primera etapa, no suelen superar los dos centímetros. En el segundo, los tumores suelen tener entre dos y cinco centímetros y ya comienzan a perjudicar a los ganglios. A partir del tercer estadio los nódulos superan los cinco centímetros y, en la etapa siguiente, se puede hablar de células que viajan, a través de los vasos linfáticos, a todo el organismo radicándose en el cerebro, pulmones, hígado o huesos.