En un clima de creciente tensión, los taxistas de Villa María se concentraron frente al edificio municipal para exigir la adopción de medidas contundentes que frenen la actividad de la plataforma Uber en la ciudad. La protesta, que contó con una nutrida participación, fue una respuesta directa a lo que consideran una inacción alarmante por parte del gobierno local.
Los conductores denunciaron que, desde hace un mes, Uber opera en Villa María sin que las autoridades municipales hayan intervenido para detener su avance, lo que ha generado un profundo malestar en el sector. Según los taxistas, la falta de medidas refleja una preocupante indiferencia y una aparente falta de voluntad política para proteger la fuente de trabajo de cientos de familias que dependen de este servicio tradicional.
Entrega de un petitorio
En un petitorio entregado al Municipio, los manifestantes solicitaron el inicio de acciones legales que culminen con el bloqueo de la aplicación en la ciudad. “Uber está dañando a la comunidad”, expresaron con firmeza, subrayando la competencia desleal y la disminución del trabajo disponible como las principales preocupaciones.