Es que luego del cambio de fiscal en la causa -Daniel Miralles se apartó y fue reemplazado por Javier Di Santo- el expediente modificó su carátula original que era homicidio preterintencional por la de homicidio simple en grado de coautoría, según confiaron fuentes judiciales a este diario.
Por lo cual desaparece la idea primaria de un “asesinato accidental o sin intención” por parte de los agresores y se establece un delito doloso.
En la nueva carátula hay también un dato central: la coautoría. Hasta aquí, el único detenido era Federico Cabrillana, que se entregó el mismo domingo en la sede policial de General Cabrera, fue derivado a La Carlota en un primer momento y ya está alojado en la cárcel de Río Cuarto. Ayer, con la nueva figura penal, también quedó detenido Federico Melano, otro de los agresores, que al igual que Cabrillana fue enviado a la cabecera departamental de Juárez Celman, La Carlota, y mañana deberá estar en los tribunales de Río Cuarto.
El abogado penalista Fernando Burlando (que participó de la causa Báez Sosa) hablará hoy con la familia Buffarini y su abogada, Rosa Sabena.
El tercero, Alejo Arias, permanece por ahora en libertad, explicaron las mismas fuentes.
Esto implica que para la investigación que lleva adelante Di Santo hay elementos para acusar a Cabrillana y Melano con el mismo grado de responsabilidad.
El caso de Arias hasta el momento queda al margen. Tanto la versión policial como la de la Justicia por ahora sostienen que no participó de la golpiza, a pesar de que uno de los testigos claves de la causa, Elías Buffarini, primo de la víctima, relató con lujo de detalles a este medio que vio a los tres jóvenes golpear a Jesús. Su testimonio será importante en los próximos pasos de la causa.
Con respecto a los testimonios, Puntal también confirmó que mañana los dos detenidos serán indagados por el fiscal que desde esta semana tomó el control de la causa. Allí está puesta ahora la atención de los investigadores, para escuchar de parte de los acusados la versión de los hechos. Hasta acá nunca se expresaron.
La indagatoria coincidirá con el día en que se realizará en General Cabrera una movilización para reclamar “Justicia para Jesús”. Será a partir de las 19 desde la Plaza Central.
“A mi hijo lo salieron a cazar”
Mario Buffarini estuvo ayer en Córdoba en una reunión con los ministros de Seguridad, Juan Pablo Quinteros, y de Justicia, Julián López. “Lo recibimos para ponernos a disposición en un momento tan difícil que le toca vivir como padre”, explicó el ministro Quinteros luego del encuentro.
Luego, ambos ministros gestionaron un encuentro entre el padre de la víctima y el fiscal general de la Provincia, Juan Manuel Delgado. “El fiscal general me adelantó que había un cambio de carátula, para mí es algo muy importante”, explicó Buffarina.
“Lo que más me importó es que fui atendido de muy buena manera. Yo estoy pidiendo Justicia por mi hijo, no quiero otra cosa”, agregó el padre de la víctima.
Para Buffarini, la nueva carátula de homicidio simple en grado de coautoría avanza en la línea que sostiene la familia desde un comienzo. “Es la verdad lo que nosotros decimos, no como se decía por ahí de que se trató de un accidente. Accidente podía ser si peleaban adentro del boliche donde comenzó la discusión. Pero a mi hijo salieron a cazarlo”, remarcó en diálogo con Puntal.
Y agregó: “Hay dos testigos que vieron cómo lo mataron a patadas”, dijo Buffarini.
Además, el padre de la víctima destacó: “El fiscal general me garantizó que se va a hacer Justicia”. En ese sentido, Buffarini insistió: “No voy a parar porque voy a seguir hasta que estén los tres responsables presos. Como debe ser. Después veremos en el juicio lo que ocurre y yo aceptaré lo que se disponga”, dijo.
Por último, el padre de Jesús reiteró: “Con la verdad que nosotros decimos, es posible que la carátula de la causa vuelva a cambiar la semana próxima. Porque ahora dicen que no tenía lesiones importantes en el cuerpo. Se dice cualquier cosa”, indicó Buffarini, apuntando contra el informe forense.
Las claves de la causa
La primera discusión entre Federico Melano y Jesús Buffarini comenzó dentro del boliche Green House, a donde habían concurrido el sábado a la noche. Por el episodio, Jesús fue expulsado por la seguridad, se subió a su auto Peugeot 306 y se fue hasta su casa de boulevard Fangio al 1300.
Melano, acompañado por Federico Cabrillana y Alejo Arias, decidieron salir del boliche e ir a buscarlo. Sabían dónde vivía, y fueron en la camioneta del primero de ellos hasta el lugar.
Cuando Buffarini bajó del vehículo, lo atacaron a golpes. Según algunos testigos, los tres jóvenes que lo fueron a buscar. Por ahora la Justicia cree que dos de ellos lo golpearon hasta que cayó y, de acuerdo al informe forense, sufrió una luxación de la columna cervical que le provocó la muerte. Llegó al hospital sin vida.
