El hecho ocurrió el lunes por la tarde y derivó en un operativo policial que llamó la atención por las características del hallazgo. Según la información oficial, alrededor de las 18.40 efectivos de la división Cordobeses en Alerta acudieron a un domicilio de la zona luego de que la mujer llamara para denunciar el hallazgo de estupefacientes. Al arribar, los uniformados fueron recibidos por la dueña de la casa y su hijo, quienes explicaron cómo llegaron a tener en su poder la inusual encomienda.
De acuerdo con el relato de los implicados, el pasado 4 de septiembre habían realizado la compra de perfumes y vapers a un proveedor de nacionalidad paraguaya. Cuatro días después, retiraron la encomienda en la misma zona. Una vez en el domicilio familiar, decidieron abrirla y fue entonces cuando encontraron los 65 paquetes que contenían lo que, a simple vista, parecía ser picadura de marihuana. Las autoridades confirmaron posteriormente que se trataba de cannabis, con un peso total aproximado de 18 kilos.
Lejos de ocultar lo ocurrido, la mujer optó por dar aviso inmediato a la Policía, lo que derivó en el secuestro de la droga y en la apertura de una investigación judicial. Por el momento, ni ella ni su hijo fueron detenidos, ya que no se los considera responsables del contenido del envío.
La procedencia de la sustancia ilegal y el modo en que llegó a esa encomienda son, hasta ahora, un verdadero misterio. Los investigadores intentan determinar si se trató de un error de logística, de un engaño a los compradores o si la maniobra está vinculada con el accionar de alguna red de narcotráfico que utiliza este tipo de envíos para trasladar droga de manera encubierta.